Ningún escaparate ilustra mejor a dónde conduce el populismo criminoso e incompetente de la izquierda más siniestra que la devastada Venezuela chavista.
“Vamos a intentarlo”. Lo acaba de proponer el más voluntarista Pablo Iglesias con la vista fija en el líder de la bancada socialdemócrata. Pero ¿a intentar qué?
Tardà, Rufián y Homs son los políticos menos presentables del proceso y a la vez unos muy cualificados representantes del nivel medio-alto del catalanismo