Lo que de verdad no acepta la izquierda pija, en Barcelona chic, es que resucite un símbolo que conjura su poder sobre la conciencia de los ciudadanos.
Incluso la trágica muerte del fiscal Maza en Buenos Aires se invoca como presagio de una nueva era. Él era el cancerbero de la ley, el signatario de las querellas que han llevado a la cárcel a los impulsores del desafío.
¿Hay novedades en una historia tan conocida como la de Carmen Díez de Rivera? Pues sí. La verdadera Carmen de Herrero, la que yo he visto en la novela, es la Transición.
Atención a lo que sucede en Arabia Saudí. Los expertos no se ponen de acuerdo en el análisis pero coinciden en que el reino está viviendo una auténtica revolución.
La serenidad en la actuación de este jurista de primer nivel no fue en modo alguno incompatible con el rigor y la firmeza a la hora de velar por el imperio de la ley.
Encontrar el modo de impedir que los separatistas puedan emplear el dinero público en subvencionar su movimiento cuando vuelvan a tener el poder es la clave para acabar con él.