Antes de abordar el avión que le llevará de gira a cinco países centroamericanos, el presidente de Venezuela, Hugo Chávez, decidió incluir en su equipaje junto con los efectos personales la espada de Simón Bolívar. Es la primera vez que un dignatario iberoamericano viaja con semejante instrumento sobre cuya autenticidad existen fundadas sospechas. La espada se encuentra en una hornacina y estará permanentemente vigilada por cuatro cadetes de escuelas castrenses venezolanas que viajarán en el avión presidencial.
Hugo Chávez anunció la decisión de portar la tizona del Libertador en su popular show televisivo Aló, Presidente. En esta ocasión, el programa duró cuatro horas, las necesarias para ilustrar a la ciudadanía venezolana sobre las virtudes taumatúrgicas de la espada. Según el presidente fue la presidenta de Panamá, Mireya Moscoso, la que sugirió que incluyera el arma en su equipaje.
Chávez visitará en los próximos días Costa Rica, Honduras, Nicaragua, Guatemala y El Salvador, para concluir su gira en Panamá y participar en la X Cumbre Iberoamericana. El ex militar golpista aseguró que portaría la espada de Bolívar, “porque la Cumbre de Panamá forma parte del proceso para retomar la senda bolivariana de la unión de los pueblos latinoamericanos”.
El presidente venezolano mantiene, según sus íntimos, “contactos permanentes” con Simón Bolívar, con quien se comunica a través de un médium, y en todos sus discursos introduce alguna cita del Libertador gracias a “ una memoria prodigiosa” según sus panegiristas, que son legión. Es fama que en los almuerzos y cenas de cierto protocolo, la silla contigua a la suya se halla vacía en homenaje precisamente a Simón Bolívar que la ocupa simbólicamente.
La espada de Bolívar fue robada por guerrilleros del grupo colombiano M-19. Posteriormente la devolvieron tras una larga negociación, aunque se asegura que la que obra en manos de Chávez es una imitación fabricada en Taiwán hace algunos años.
Chávez, Castro y Fujimori constituirán la principal atracción de la X Cumbre Iberoamericana que se inaugura en Ciudad de Panamá el próximo viernes y que estará dedicada a la infancia. La Cumbre ha provocado en la sociedad panameña, afectada por graves problemas económicos y sociales, reacciones airadas por parte de una ciudadanía que considera un dispendio injustificado los gastos protocolarios en que incurrió el gobierno para su preparación.
Entre los actos simbólicos protagonizados por la espada de Bolívar previstos para la Cumbre está la entrega simbólica del arma ante un retrato del ex presidente Arnulfo Arias, marido que fue de la actual presidenta panameña, Mireya Moscoso. Arias, tres veces presidente de Panamá (y tres veces derrocado también por golpes militares), lo es todavía hoy “por procuración” gracias a su viuda, que ganó las elecciones en su nombre, aunque hacía varios años que el veterano político había fallecido.
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