Menú
Alicia Delibes

Comprensividad y Ley de Calidad

Pilar del Castillo no tendrá fácil sacar adelante su proyectada Ley de La Calidad de la Enseñanza con el consentimiento de la oposición a no ser que sea una ley que deje, esencialmente, las cosas como están; es decir, que no toque el principio dogmático en el que se basa la LOGSE, el de la llamada “comprensividad”.

La comprensividad exige que todos los individuos tengan la misma educación y en los mismos centros escolares hasta los 16 años, esto es, hasta que hayan terminado su Enseñanza Secundaria Obligatoria. Contra este principio atenta la creación de distintos itinerarios en función de las perspectivas profesionales de cada cual.

La “progresía educativa”, que es muy “zorra”, ha convencido a la administración, llamada conservadora, no sólo de la necesidad de comenzar todos sus discursos manifestando que la LOGSE es un logro social incuestionable, sino también de la total incorrección que supone creer en una diferencia de aptitudes intelectuales entre los individuos. Estos dos preceptos, impuestos por la oposición y respetados por el partido en el poder, suponen un callejón sin salida que incapacita para cualquier mejora sustancial de nuestro sistema.

Ya que gustamos de mirar a nuestro entorno para justificar lo que hacemos, miremos una vez más. En el Reino Unido, modelo de nuestra “comprensividad”, el profesorado dimite, busca cualquier otro trabajo antes dar clase a niños y adolescentes. Si aquí no ocurre lo mismo es porque, al contrario de lo que sucede con los profesores británicos, los nuestros son funcionarios y, hoy por hoy, ser funcionario a tiempo parcial sigue siendo un “chollo”.

En Sociedad

    0
    comentarios