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Antonio Robles

Guerra y Felipe, señales de humo

En Cataluña necesitamos hoy más que nunca referencias y referentes, de todas las ideologías.

Federico Jiménez Losantos recordaba el pasado domingo las muchas responsabilidades que tuvieron Felipe González y el PSC en la consolidación de la Cataluña secesionista de hoy. Lo recordaba a propósito de la llamada del exdirigente socialista "A los catalanes" contra la secesión. Dos días después lo hacía Alfonso Guerra con otro aún más contundente, "Elecciones trucadas".

Convenía recordarlo. Y Losantos lo podía hacer con conocimiento de causa. Él fue el primer activista damnificado de la Resistencia al nacionalismo, que tanto ayudaron a consolidar estos dos líderes del PSOE.

Bueno es recordarlo, imprescindible ponernos en guardia ante las veladas concesiones que habrá de hacer el Estado para embridar a los separatistas, según Felipe González. Digo "según Felipe González" porque el tono del artículo de Alfonso Guerra es bien distinto al de su colega. A pesar de haber sido él, sobre todo él, el que ayudara a consolidar al PSC a costa de la Federación socialista del PSOE en Cataluña.

La determinación de Guerra de ahora no rehabilita sus errores del pasado, pero puede servir para abrir los ojos a las generaciones actuales ante la deslealtad probada del catalanismo. Sobre todo de su partido. Por tanto, cuando acusa al nacionalismo de estar dando un golpe de Estado a cámara lenta y pide la aplicación del artículo 155 de la Constitución sin complejos para acabar con la sedición pone fin a conllevanzas equidistantes con las que su partido ha enmascarado durante 35 años su complicidad con el nacionalcatalanismo por meros cálculos de poder. Exactamente como el PP.

Es preferible este posicionamiento que la equidistancia o la pleitesía a que nos tiene acostumbrados el PSOE y que sigue exhibiendo el PSC. Ayer, en la comparecencia de Artur Mas en el Parlamento, Iceta demostró una vez más que pertenecen a las mismas familias acomodadas catalanistas que los del Junts pel Sí. ¡Cuántos remilgos ante un sedicioso, un impostor y un presunto ladrón!

En Cataluña necesitamos hoy más que nunca referencias y referentes, de todas las ideologías. Hayan colaborado o no con el sarampión nacionalista de una época de políticos neutralizados por una España acomplejada de ser, y gestionada por los chantajistas de la normalización.

Otra cosa es la inquietante salida de Felipe González: "Eso es lo que necesitamos: reformas pactadas que garanticen los hechos diferenciales sin romper ni la igualdad básica de la ciudadanía ni la soberanía de todos para decidir nuestro futuro común". Vuelta la burra al trigo. Bla, bla, bla; lenguaje de plastilina. Lo que no puede ser, no puede ser y además es imposible. Si se garantizan hechos diferenciales no se puede garantizar la igualdad. Una mujer es diferente a un hombre, pero ese hecho biológico evidente no puede pretender el reconocimiento de un hecho diferencial que le dé ventajas, pues los dos, siendo diferentes, han de estar regidos por la igualdad de derechos y obligaciones de la ley. Lo explica magistralmente, J. M. Ruiz Soroa en el artículo "Iguales y diferentes". De obligada lectura.

Esa es la cuestión, en Cataluña el PSC da a esas reformas pactadas un contenido lleno de privilegios basadas en el federalismo asimétrico: blindar la inmersión (escola catalana en llengua i continguts), convertir el TSJC en la última instancia judicial en Cataluña, un pacto económico al modo del cupo vasco, garantizar el principio de ordinalidad y reconocer Cataluña como nación. Es decir, todo lo que no se permitió en el Estatuto y todo lo que venía pidiendo el nacionalismo hasta el momento de tirarse al monte.

Al nacionalismo no hay que pasarle la mano por el lomo, hay que deslomarlo, como deslomamos en la Transición al franquismo, sin venganzas pero obligando a todos sus seguidores a respetar la Constitución de un país de ciudadanos libres e iguales en derechos y obligaciones. Y que se vayan con el cuento de sus derechos históricos al carajo. Como se fue la antigua aristocracia.

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