Las hermanas aparecieron juntas en el teatro madrileño donde Julio José Iglesias debutó en el musical Grease, en el que durante unos días va a estar protagonizando el mismo papel que hiciera John Travolta en el cine junto a Olivia Newton-John.
Ana apareció con un semblante serio y preocupado. La hija de Isabel Preysler está atravesando con toda seguridad el peor momento de su vida a consecuencia del derrame cerebral sufrido por su padre hace poco más de un mes, motivo por el cual continúa ingresado en la UVI en una clínica madrileña. Me comentan que después de estar con él, siempre solicita hablar con los médicos para que le informen de su estado de salud y de su evolución.
Por su parte, Tamara también quiso apoyar a su hermano. Siempre ha reconocido que es una persona muy familiar, y tampoco se separa de su madre, está muy pendiente de ella. No hay que olvidar que Isabel perdió a su hermana Beatriz, a la que se sentía muy unida, hace poco más de seis meses a consecuencia de un cáncer. Este nuevo disgusto ha sido tremendo para toda la familia, y en especial para ella.
Sus dos hijas pequeñas están siendo el mejor apoyo para Preysler, que a raíz de sufrir su marido el ictus, no ha faltado ni un solo día a visitarle, siempre acompañada por ellas.
No ha habido novedad alguna desde la semana pasada. La noticia era que había recobrado la consciencia, pero dentro de la gravedad, motivo suficiente para tener que permanecer en la Unidad de Cuidados Intensivos.
A pesar del amargo trance por el que está pasando toda la familia, Tamara Falcó no pierde la sonrisa, y ese gesto tan espontáneo le ha servido para convertirse en un personaje muy querido por la prensa.