Cómo se le echa de menos a la Obregón en Madrid, con lo que le gusta a ella un photocall, y contar alguna batalla. La verdad es que es un personaje que da mucho juego.
La gran estrella del celuloide lleva casi un mes en Miami estudiando unos proyectos profesionales. Esta decisión la tomó al no tener buenas oportunidades en España. Después de pensárselo durante un tiempo, decidió poner tierra por medio, o mejor dicho agua, y trasladarse a los Estados Unidos y así poder estar más cerca de su hijo Álex, que estudia en tierras americanas.
Ana no quiso contar mucho aunque podrían tratarse de dos proyectos, uno como actriz y otro como presentadora en un canal de televisión latino.
Para probar suerte estará casi medio año, y si la andadura sale bien, se trasladará de manera definitiva. Hasta el verano no tiene pensado regresar. Sería fantástico que su vuelta volviera hacer ese posado estival, que nadie como ella sabe hacer. Recuerden que el pasado verano lo hizo anunciando un producto de belleza. Si es que el verano sin ese posado no es lo mismo.
Anita, que es muy larga, no quiso dar más detalles sobre esos proyectos que ella misma calificó como de "importantes", u que de concretarse, la tendrían fuera de España mucho tiempo.
De momento está allí, y no se sabe si su último Romeo, Adam Peres, habrá dejado por unos días el trapecio y se habrá ido a ver a su Julieta. Ana en ningún momento reconoció que hubiera algo entre ellos que no fuera una simple e inocente amistad, aunque las fotos publicadas de los supuestos amiguitos no decían eso: se podía ver una amistad con derecho a roce.
De todas formas a la Obregón no le gusta perder el tiempo, y seguramente ya habrá conocido a algún "pollo" que le sirva para pasar buenos ratos de relax, y así poder sobrellevar tanto trabajo como seguramente nos contará a su regreso.