El estado de salud del diestro cada vez es más satisfactorio. Los médicos que le atienden en el Hospital Virgen Macarena de Sevilla dictaminan que su evolución es favorable.
Es muy probable que este viernes le levanten con una grúa y le mantengan sentado en una silla de ruedas para ver cómo reacciona su organismo. No hay que olvidar que el torero lleva casi un mes inmóvil en una cama.
Tiene anemia, pero desde hace un par de días ya le administran líquidos, como algún zumo, agua e infusiones. También ha comenzado la rehabilitación en brazos y piernas, a causa de haber perdido masa muscular, y de esta manera van a intentar que poco a poco la pueda ir recuperando.
Lo más delicado hasta el momento son los pulmones, aunque la respiración asistida ya no es continua, sino intermitente, y al respirar por sí mismo hace ejercicios de capacidad torácica.
A día de hoy, no está previsto que tenga que ser sometido a una nueva intervención quirúrgica. Está pendiente una de colon, pero no se sabe cuándo será preciso practicársela.
Como consecuencia de haber experimentado esta evolución, y al no tener que estar sedado, se da perfecta cuenta de quiénes están con él, e intenta comunicarse con los presentes por medio de monosílabos.
Su familia no ha dejado ni un solo día de acudir a visitarle y están todos muy pendientes de él, al igual que sus hijos, que van a diario a ver a su padre.
Ya no puede quedar mucho para que se sepa el resultado del informe de la Guardia Civil, para esclarecer las causas del accidente que se produjo el pasado 28 de mayo. Todo apunta a que, como mucho, la semana próxima se sabrá. De momento, continúa la espera.