José Ortega Cano finalmente ha podido ser intervenido quirúrgicamente de la operación que estaba pendiente desde hace tiempo, del tobillo izquierdo, a consecuencia del accidente sufrido hace unas semanas.
Los médicos no se atrevían a operarle debido al estado de máxima gravedad en la que se encuentra, después de unos días de espera, y al remitirle un poco la fiebre, al final se han decidido a realizarla.
Más de 7 horas ha permanecido en el quirófano, y hasta el momento no se han registrado incidencias quirúrgicas importantes. Le han tenido que cambiar unos tornillos que le tuvieron que poner entre el fémur y la rodilla, aparte de la reconstrucción del tobillo.
Ahora solo queda esperar y ver como es su evolución. Por el momento los pulmones parece que están empezando a funcionar y los médicos están viendo la posibilidad de retirarle la ventilación asistida a la que lleva 17 días conectado, motivo por el cual sus cuerdas vocales están muy dañadas, y para evitar que sufran y de paso que pueda respirar por sí mismo, también se plantean realizarle una traqueotomía.
Por otra parte, las investigaciones del accidente continúan su curso, y el juez encargado del caso, ha ordenado al Instituto Nacional de Toxicología que analice las muestras de sangre extraídas en el hospital antes de realizarle trasfusiones de sangre, en busca de restos de alcohol u otras sustancias.
La familia del maestro está un poco más esperanzada, peros siguen siendo cautos en sus declaraciones. Todos los hermanos de José no se mueven de su lado con la esperanza puesta en que ocurra un milagro y confían en que poco a poco el maestro se recupere.
Por el momento lo único que se pude hacer es esperar.