En el municipio de Fuenlabrada, cercano a la capital de España, se ha desarrollado un brote de Leishmaniasis. Hay que tener en cuenta que la Comunidad de Madrid es zona endémica de esta patología que está originada por diferentes parásitos protozoos de la familia de Leishmanias. En el humano hay dos formas básicas: la visceral y la cutánea.
El agente causal es un mosquito llamado Flebotomo que al picar a una persona o a algún animal tipo perro nos transmite el parásito. El mosquito Flebotomo es un chupador de sangre y a cambio nos deja en nuestro organismo la Leishmania.
La Leishmania Visceral, también se la conoce como Kala-Azar y la origina la Leishmania Donovani. Es una patología frecuente en enfermos de SIDA.
En la zona del Mediterráneo es frecuente con otras dos formas de Leihmanias, la Donovani y la Chagassi, esta enfermedad es también frecuente en niños en contacto con animales domésticos no vacunados.
Los síntomas mas frecuentes son fiebre, que puede ser alta, pérdida de peso, bajo número de plaquetas, aumento del bazo y del hígado.
En la Leishmania Cutánea, también llamada Botón de Oriente, nos encontramos un nódulo grande que puede ulcerarse y que a la caída de la costra nos muestra un infiltrado que se infecta rápidamente y requiere nuestra atención inmediata para evitar infecciones. El diagnóstico se basa no solo en la clínica sino en pruebas de laboratorio o biopsias. Además disponemos de fármacos para su tratamiento, pero es necesario acudir al médico pues el diagnóstico temprano tiene mejor respuesta terapéutica,
Este brote de Fuenlabrada parece deberse al aumento de liebres en el campo de este municipio. Es recomendable que los animales de compañía sean vacunados por el veterinario y evitamos así la enfermedad en el humano.