Hace unos días, durante una reunión con compañeros, comentamos la patología de la micosis perivaginal. Uno de los comentarios más repetidos es que se trata de una patología muy frecuente, más de lo que pensamos. No sólo aparece en mujeres que no cuidan su higiene íntima, sino también en aquellas que guardan un celo especial en mantener limpia esa zona. La enfermedad viene originada por levaduras del género Candida. La más frecuente es la Candida Albicans, que origina alteraciones superficiales. Se localiza frecuentemente en los pliegues inguinales y zonas vecinales.
Este tipo de hongos los padecen mujeres sanas cuando no se secan bien la zona perivaginal después del aseo. La humedad hace que se desarrollen este tipo de levaduras. Esta afección es común en mujeres que sufren diabetes, que han tenido infecciones o en mujeres con un sistema inmunológico disminuido.
El diagnóstico es sencillo ya que la sintomatología también lo es. Se manifiesta con un picor intenso en la zona enferma. A veces, al rascarse se producen heridas que se infectan. El diagnóstico de laboratorio es interesante pues nos indica si se trata de candidiasis. El examen se lleva a cabo tomando una muestra de flujo vaginal.
Es importante advertir de que el tratamiento de este tipo de dolencias es seguro, aunque largo. Puede durar semanas y es necesaria la abstención de relaciones sexuales, ya que es muy contagiosa.
Finalmente, nos gustaría aconsejar que al menor síntoma de picor en la zona de los genitales hay que acudir al médico, ya que el diagnóstico temprano hace que este tipo de dolencias remita antes.