Los Ejércitos extranjeros implicados desde hace más de dos años y medio en el conflicto congoleño se habían comprometido a retirar sus efectivos a 15 kilómetros a cada lado de la línea de confrontación para permitir que la "zona colchón" fuera ocupada por los "cascos azules" de la ONU.
"En algunas zonas, especialmente en el área de Kananga (centro de la RDC), las fuerzas gubernamentales no se movieron como estaba previsto", ha dicho Diallo, quien admitió que "no sabemos que ha sucedido y estamos recabando información".
El general senegalés señaló que, según el comando conjunto de las Fuerzas Armadas Congoleñas (FAC) y sus aliados de Angola, Zimbabue y Namibia, "la orden de repliegue fue dada a tiempo", pero que desde las áreas de operaciones los comandantes gubernamentales locales afirman "no haber recibido ninguna instrucción al respecto".