Si es un vicio recordar lo que ha ocurrido a lo largo del año en cualquier materia para escoger los personajes o hechos más sonados, espigar entre la programación televisiva diez personajes del 2000 es puro megavicio. El año que empezó con tanta fanfarria ha dejado bastantes cadáveres y unos cuantos resistentes en la pequeña pantalla. De los primeros, nadie se quiere acordar, y los segundos andan estos días haciendo horas extraordinarias para salvar la cara de sus cadenas.
Entre los vivos y con éxito el número uno del 2000 ha sido Carlos Sobera. La prueba del algodón de su excelente situación en el ranking televisivo es que El Corte Inglés lo ha contratado para hacer la publicidad de la empresa esta temporada. Y, como no podía ser menos, Tele 5 echa mano de él en Nochevieja junto a Félix Alvarez, otro emergente que ha traspasado los límites de “El Informal”. La misma cadena tuvo en la primera mitad del año su boom con “Gran hermano”. De todos los habitantes de la casa de Soto del Real que andan exprimiendo su fama podríamos quedarnos con Ania, que estos días se ha querido emparentar con la supuesta novia del Príncipe Felipe porque coincidió en un pase de pijamas en un centro comercial. !Pobre Eva Sanum!
TVE supo aprovechar el tirón de Jordi Estadella para poner en marcha “Audacia”, a pesar de las dificultades. La cadena pública no ha incorporado ninguna figura a su parrilla, aunque sigue luciendo palmito y buenos resultados Anne Igartiburu. Con poca imaginación, pero bien aprovechada, siguen liderando los fines de semana Cruz y Raya, a los que veremos en Nochevieja de nuevo llenando el hueco reservado al humor. Antena 3, por su parte, tampoco ha traído ninguna novedad salvo en los resbalones. Con ella se vino abajo Jesús Vázquez, un chico tan “imprescindible” como Nuria Roca para poner buena cara cuando se pegan el gran morrón. Frente a estas glorias de un día, no es extraño que sean inamovibles, a pesar de todo lo que llovió este año, Ana Rosa Quintana y Bertín Osborne.
A estos nueve nombres que nos vienen a la memoria, habría que añadir un ejemplar único en cuanto a resistencia: Jesús Mariñas, hoy medio oculto detrás de una barba.
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