Ni pagando sueldos de caerse de espaldas consigue Antena 3 fichar a un profesional avezado y famoso para su franja matinal. Faltan dos semanas para el retorno de las vacaciones y todavía no hay quien se decida a competir con María Teresa Campos. De momento, Carlos Sobera ha renunciado. Isabel Gemio hará un programa más noctámbulo y Juan Ramón Lucas tiene una difícil vuelta atrás. Después de haber dejado el magazine la pasada temporada para acabar tropezando con la escuela de actores más fugaz de la historia de la televisión, y hasta con Buruaga, mucho tendrán que agachar las orejas ambas partes para que el periodista reciclado vuelva a las andadas rosas.
Nada, sin embargo, es descartable cuando hay contratos jugosos que negociar. Inés Ballester, que trabajó de sustituta de Ana Rosa Quintana en Antena 3, se ocupará de las mañanas de TVE. La presentadora valencia tiene querencia últimamente por las cadenas públicas y siempre encuentra acomodo en programas ligeros, así que está descartada. Mercedes Milá parece que volverá a Tele 5 para hacerse cargo de “Gran Hermano”. Jesús Vázquez está pluriempleado. Sólo queda jugar con lo que tiene a mano. Jordi González, aunque se ha hecho un hueco con “Abierto al anochecer” trabaja para la productora de Ana Rosa Quintana, que algún compromiso tiene con la cadena y Máximo Pradera sigue en expectativa de destino.
Sin embargo, una solución ideal sería que Antena 3 se olvidara de hacer el mismo programa que el resto de cadenas generalistas y pusieran series como este verano. El espacio que se dedica a los magazines entre mañana, tarde y noche es desproporcionado. Ya no cabe un testimonio más, ni un corillo de comentaristas rosa. Si, además, María Teresa Campos es imbatible y TVE entra en el juego con Inés Ballester ¿no sería más razonable poner algo diferente? El pánico a hacer algo distinto a la competencia es lo peor que le puede pasar a una cadena.
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