Con Rosa caída en combate y Gestmusic enriquecida por la venta a Endemol de los derechos de “Operación Triunfo”, ha comenzado ya la segunda edición del concurso que más le ha animado la vida a TVE. Los miembros de “La Trinca” han hecho un negocio redondo, pero no se retiran a disfrutar de sus millones, sino que ya han puesto en marcha la maquina de hacer billetes como productores.
Al igual que ha ocurrido con “Gran Hermano”, que arrasó en audiencia con la vuelta de Mercedes Milá al plató de Tele 5 rodeada de tres generaciones de “hermanos” que anidan en diferentes programas de televisión, “OT” ha vuelto corregida y aumentada. En “La 2” ya podemos ir conociendo a los buscadores de fama de la mano de Ainhoa Arbizu, una presentadora de aspecto más moderno y juvenil que las de la edición anterior. Nina se ha calzado los calentadores para hacer de los 17 habitantes de la Academia unos muñecos rentables y TVE está emocionada con la esperanza de volver a reeditar un éxito de audiencia difícil de igualar.
Por su parte, Javier Sardá, sigue alimentando en Tele 5 el fuego de “OT”. Gestmusic manda. David Bustamante coquetea con Boris Izaguirre para explotar el filón “gay”. Chenoa y Bisbal aparecen cuando les mandan, y hasta Tenorio hace un hueco entre sus viajes de amor para acudir con los marcianos. El verano ha sido un pequeño paréntesis para preparar el segundo ataque de “OT”. TVE, que ya se ha alegrado bastante con la buena acogida de los nuevos capítulos de “Cuéntame”, está dispuesta a echar el resto con los aspirantes a cantar en Eurovisión. Los cambios en el equipo director de la cadena pública no han afectado a la estrategia comercial. Están en manos de Mainat y Cruz, los listos del barrio, dispuestos a montar un rentable negocio con tres patas: TVE, Canal Satélite Digital y Tele 5. Pocos dudan de que lo conseguirán también este año.
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