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Enrique de Diego

La UE, ¿cómo garantía?

Según un dirigente del PP, la postura de la UE se establece como garante de que no habrá un genocidio del pueblo palestino. “Ya no es momento para soluciones de otras épocas”. Añade un apunte histórico: igual que Europa fue garante del pueblo judío y el Estado de Israel, ahora lo es del pueblo palestino. Empecemos por la premisa menor, por la histórica. Los judíos fueron prácticamente exterminados de Europa y por europeos, porque los nazis no eran seres de otra galaxia, sino alemanes. En casi todas las naciones europeas hubo decidida colaboración en el exterminio, como en el caso de Francia.

Si nos atenemos a la afirmación del dirigente popular, se establece una conclusión: Israel está llevando o quiere llevar a cabo un genocidio del pueblo palestino. No hay ninguna fuerza política relevante israelí que plantee nada parecido. La postura más radical propugna la separación completa de los territorios para evitar la infiltración de terroristas. Sí existe una propuesta teórica de genocidio de los israelíes en los grupos Hamas y Jihad Islámica con fuerte implantación entre los palestinos.

Las operaciones en curso se mueven, con el dramatismo de toda guerra o acción bélica, dentro de los principios de responsabilidad personal, que la civilización occidental ha heredado básicamente del judaísmo, no de los de responsabilidad colectiva, propios del totalitarismo, y que ha asumido el integrismo islámico. Es decir, los judíos buscan destruir la infraestructura terrorista y detener a los terroristas. Se está poniendo en evidencia la existencia de “milicianos” que no corresponden al sentido de una propuesta de Estado sino de una “guerra de liberación”, que sí entraña una concepción favorable al genocidio. Es conocido que las incursiones israelíes se producen tras atentados de especial crueldad y es notorio que estas no tienen lugar desde que el ejército israelí ha pasado a la ofensiva. Eso es una demostración práctica de que se está actuando bajo el principio de autodefensa.

La inoperancia de la UE, que parece haber molestado al partido en el gobierno en España, es la causa de un deterioro constante de sus fuerzas armadas y de las lógicas diferencias de criterio entre estados. Es probable que el proceso de unificación, si pretende asemejarse a los Estados Unidos de América, incluso distanciándose de ellos, genere tensiones contraproducentes.

En cuanto al desplante de Sharon a Piqué (con su sola presencia como ministro de Exteriores se entiende la inoperancia de la UE, desde Ercros, su trayectoria es inoperante) y Solana (otro que tal baila), ambos se presentaron en Israel con condiciones no negociadas antes. La prepotencia, casi ingenuidad, fue europea. Torpeza precedida por megalomanía infantil y pérdida del sentido de la realidad.

Cada día en los medios de comunicación se introducen algunas groseras manipulaciones: por ejemplo, la Natividad de Belén está asediada. Lo cual es cierto. Pero se obvia que previamente ha sido invadida por “milicianos” palestinos. Esto no responde al acogerse a sagrado, de personas indefensas, sino a utilizar a los frailes y a la Basílica en sí, como escudos.

La verdad es que no suponía hasta que nivel habían llegado los complejos de progresismo en el centro reformista. Poco menos que Sharon conspira contra los fastos de la presidencia española de la UE, mientras los atentados terroristas palestinos eran tolerables. Suicida incoherencia en una nación amenazada por el terrorismo. Pura hipocresía.

Si Israel tuviera que confiar en la UE como garante para evitar su genocidio, a lo mejor –o a lo peor– se culminaba el Holocausto.

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