Un nuevo enano acaba de crecerle a la ACB en su particular circo. Cuando la firma del cuantioso contrato con Movistar Plus parecía arreglar uno de sus grandes caballos de batalla de los últimos años, encontrando al fin un operador que mimara el producto como se merece, la confirmación del nuevo formato de la Euroliga supone un nuevo dolor de cabeza en la Calle Iradier.
Tras el acuerdo alcanzado con la multinacional IMG, los once equipos con licencia A de la máxima competición continental, entre los que se encuentran Real Madrid, Barcelona y Baskonia, han decidido que, a partir de la próxima temporada, la Euroliga será una auténtica liga de 16 equipos y 30 jornadas. Una verdadera liga europea, con 11 equipos clasificados de oficio durante 10 años, y otros 5 rellenando los huecos por criterios deportivos cada temporada.
Un nuevo escenario que, no por esperado a medio plazo, sorprende por lo inminente de su aparición. Este mismo miércoles, Francisco Roca, presidente de la ACB, reconocía en un acto, según recoge Mundo Deportivo, su preocupación tras el anuncio, del que decía desconocer los datos en profundidad hasta una próxima reunión con Jordi Bertomeu, su homólogo en la Euroliga. Ya se puede poner las pilas Roca, pues el tiempo apremia, y un nuevo varapalo al interés por la ACB podría estar a la vuelta de la esquina de confirmarse el planteamiento de los clubes más poderosos del continente.
Aunque lo más llamativo de las declaraciones del mandamás ACB en dicho acto fue una frase que, analizada en profundidad, es de un sentido común atroz, pero cuyo trasfondo no puede ser más incongruente: "El mérito deportivo es muy importante en el deporte, no puedes abandonarlo". No podría estar más de acuerdo, señor Roca. Chapeau. Pero no piense en ello ahora que Unicaja o Valencia Basket, dos de sus grandes, se pueden sentir heridos. Especialmente los malagueños, pues a orillas del Turia ya están curados de espantos. Párese un segundo y reflexione sobre su frase, pero también el esperpéntico escenario de los ascensos y descensos a la ACB en los últimos años. Pregunte en Burgos, o en Orense, qué piensan de sus palabras.
Estamos de acuerdo, señor Roca. No nos gusta esta Euroliga prácticamente cerrada, en la que será casi una epopeya lograr plaza, y cuyo resultado será dañino para la ACB. Pero el movimiento se demuestra andando y, desde luego, pocas ligas hay más cerradas ahora mismo en el continente que la que usted preside. Ojalá sea consecuente con sus palabras y actúe en consecuencia, en todos los frentes. Hay problema doméstico evidente que es imprescindible arreglar. Y ya. Estoy convencido de que al baloncesto le iría mejor. Porque no todo puede ser Real Madrid y Barcelona. Y Baskonia, al que hay que meter en este saco también. Pero tampoco Unicaja o Valencia. Porque Burgos, Alicante, Ourense, y lo que te rondaré morena (que se preparen Palencia o Melilla, por decir dos, si se les ocurre ascender), también existen.