La televisión pública va a utilizar una vez más nuestro dinero contra nosotros, el fruto de nuestro trabajo contra nuestros intereses. A los mentecatos zapaterinos de la caja tonta no se les ha ocurrido nada mejor que perpetrar una serie de documentales para denigrar lo que ellos llaman "el actual modelo neoliberal de globalización". Impulsarán necesariamente algún viejo modelo neointervencionista de proteccionismo.
Trabajan contra la libertad, presentada bajo extravagantes etiquetas, las voces que TVE va a amplificar: Galeano, Pérez Esquivel, Saramago, Bové y Mayor Zaragoza. Es decir, un caduco charlatán, un zascandil filoterrorista, un antisemita narcótico, un delincuente quesero y un haragán ex franquista. Unidos a otros elementos liberticidas extraídos de la red Attac, parida por –o de– Ignacio Ramonet, como Manu Chao y Susan George. Cantarán a coro bajo tonta batuta sociata a fin de convencer a nuestra juventud de la maldad de los valores occidentales, de la intrínseca perversidad del capitalismo y de los males de la competitividad, de la libre empresa y del derrumbe arancelario.
Fatiga recordar de nuevo que el gran lobby francés manipula y agita con un objetivo primordial: proteger el sector primario del país vecino de la competencia agrícola africana. Prolongando así el criminal sistema de subvenciones europeas que tiene estrangulada la economía del tercer mundo. Ramonet ha reconocido que lucha "contra el virus liberal"; se agradece la sinceridad del adulador de Castro y director de Le Monde Diplomatique, con cuya basura ideológica reciclada construye TVE sus contenidos "culturales y sociales".
El PSOE se asigna periódicamente la tarea histórica de echar a perder a la juventud española. Lo hizo cuando sus cachorros nutrían las patrullas de madrugada. Lo hizo, ay, en los años ochenta, y personalmente jamás les perdonaré por eso. Se dispone a hacerlo de nuevo. Cuando las energías del mundo van en una dirección, ellos señalan a los nuestros el camino inverso. No quieren veinteañeros formados y emprendedores. Los quieren okupas, verdosos, rojizos, errados, exigentes, meritofóbicos, furiosos. ¿Por qué?
