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Juan Manuel Rodríguez

Delfín de Jordan, heredero de Chamberlain

Los Lakers lograron ciento veintidós puntos en el partido, lo que quiere decir que todos los compañeros de Bryant juntos consiguieron cuarenta y un puntos, la mitad de los obtenidos por Kobe.

Kobe Bryant le ha metido este domingo ochenta y un puntos a los Raptors del base español José Manuel Calderón, que ya es meter, amigos míos. Se quedó a tan sólo diecinueve del mítico y redondo record (cien) obtenido por el mítico Wilt Chamberlain en aquel mítico partido del mes de marzo del 62 contra los Knicks de Nueva York (todo, como puede apreciarse, realmente mítico). Al igual que sucediera con Fernando Romay y aquel, también mítico, tapón que le pusiera a Michael Jordan, Calderón ya podrá contarles algo más a sus nietos. Bryant anotó veintiocho de cuarenta y seis tiros de campo, incluidos siete de trece triples, y dieciocho de veinte desde la línea de personal, capturó seis rebotes, dos asistencias, recuperó tres balones y puso un tapón.

Los Lakers lograron ciento veintidós puntos en el partido, lo que quiere decir que todos los compañeros de Bryant juntos consiguieron cuarenta y un puntos, la mitad de los obtenidos por Kobe. Esto de meterle ochenta y un puntos a un equipo de la NBA debe ser algo así como que un jugador de fútbol le marque él solito seis goles al todopoderoso Milán en las semifinales de la Champions League. Como siempre sucede en estos casos todo el mundo habla ahora de qué habría sucedido en un hipotético duelo entre aquellos Warriors y estos Lakers. O, para ser exactos, qué habría pasado en un duelo entre aquel Chamberlain y este Bryant. Resulta imposible saberlo.

Cambiando de tercio, aunque siguiendo con el mundo de la canasta. Me imagino que los responsables de la ACB habrán dado un salto (íntimo) de alegría tras comprobar cómo el Real Madrid se clasificaba, aunque por los pelos, para la fase final de la Copa del Rey. Lo contrario habría supuesto un palo muy gordo para los organizadores. El equipo de Maljkovic se jugaba su presencia en la Copa, pero daba la sensación de que Aíto García Reneses, enemigo irreconciliable del entrenador madridista, estaba luchando por su particular final de la Euroliga. La perdió. Ahora Maljkovic anuncia un par de fichajes sorprendentes. Uno podría ser Carlos Jiménez y dicen que el otro llegará de la NBA. Supongo que no será Kobe Bryant.

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