Aunque te agradezco con agrado el cumplido, he de decirte que el empeño en la crisis de Gobierno sólo desvela cierta pelusilla por lo bien que lo pasamos últimamente aquí en el PSOE. Y lo entiendo, la verdad, porque si hablamos de crisis internas... en fin, que en esto el Gobierno no gana por mucho que te empeñes. Porque en mi PSOE la crisis dista mucho de la desaceleración de Zapatero porque acelerada está un rato. Tal es su magnitud que los compañeros socialistas cada vez lo son menos, comienzan a criticarse unos a otros y el 'trasatlántico' socialista se ha convertido en "una patera", en palabras de un miembro destacado de la Ejecutiva con el que nos reímos a mandíbula batiente el jueves en el Senado. Lejos de lo que pudiera pensarse, "no es el momento de abandonar ahora el barco" porque ahora precisamente es cuando se vislumbra tierra en el horizonte. Un horizonte de cambio que está relativamente cerca pero no tanto. Pero vayamos por partes "como Jack el destripador", como le gusta decir siempre a tu ministro JFD.
Se habló mucho de Joan Mesquida y sus aspiraciones baleares en la Cámara Alta y la traducción que hicieron los socialistas es la siguiente: "Lo que significa Mesquida es que no hay estrategia posible para acallar las voces críticas. No hay tabique ni muro de contención capaz de aplacarlas". En esto coincidían críticos y los que hasta ahora no lo eran pero ahora quién sabe, porque esto es un auténtico crucigrama. Voces que acaparaban la atención de los cronistas del PSOE mientras Rubalcaba se resguardaba en una esquina junto a Griñán. Habló, por poco tiempo y sin agrado, con nosotros para intentar desviar el balón de Mesquida asegurando que "todo me parece bien", que "son las reglas del juego", que "es amigo mío y me informó" y que "me parece bien". Sin embargo lo que dijera Rubalcaba fue lo menos relevante de la jornada constitucional porque tal parece que en esta "patera" hay cuatro que están remando mientras que quien supuestamente fija el rumbo ha sido amotinado por cuatro gondoleros, piratas o polizones que hacen virar la embarcación conforme a sus intereses. Y te preguntarás quiénes son. A eso voy.
Lo que está claro es que todos reniegan ya públicamente de un Rubalcaba que "forma parte del pasado" y con el que no cuentan para el nuevo periodo: "Las primarias sólo será malas para la dirección si se presenta la dirección". Así de claro. Pero hay cuatro personajes en liza que ya no descartan nada porque "todos tenemos nuestras ambiciones". Se dejan querer dos clásicos, Patxi López y Carmen Chacón, frente a dos jóvenes promesas, Eduardo Madina y Emiliano García-Page. Estos últimos se van quitando la careta y quienes les apoyan se suman a la voz de Felipe González con eso de que hace falta un PSOE con "vocación mayoritaria". Su lectura de las palabras del talismán es que "Felipe intentaba decirnos que en la oposición hay que evitar los radicalismos y optar por la moderación". ¿Dónde queda entonces Tomás Gómez?, te preguntarás, querido Pablo, al igual que yo. Respuesta de un dirigente del PSOE: "Pues es que Tomás tiene vocación minoritaria". Meridiano, ¿no? Que Tomás vaya a concurrir a unas primarias está prácticamente descartado. Primero, porque los suyos le ven como una broma; y segundo, porque "le ha trastocado los planes Esperanza Aguirre".
Superado el quién y el cómo nos queda el cuándo. Y esa es la cuestión y lo que centra el debate en el PSOE. Hay dos corrientes. Los que piden que sea antes de las europeas de 2014 y los que apuestan por que sea tras las europeas y antes de las municipales. Los primeros argumentan que "el 85% de los problemas del partido están en Madrid" y "o arreglamos Madrid, o no podemos mandar a la infantería a que muera" en los comicios europeos de junio de 2014. Temen además seguir regando "las plantas trepadoras" de IU y UPyD y seguir perdiendo cuota y concluyen con que "un año malo para Rajoy no puede suponer que no haya cambios en el PSOE". Lo segundos defienden aplazar el debate hasta después porque lo que quieren es sustituir las primarias por un "congreso de vértigo" adelantado.
Lo cierto, querido Pablo, es que mientras Rubalcaba no ha cumplido su aniversario como secretario general, los socialistas hablan de un 39º Congreso en el que "no está nada claro por dónde ir" pero lo que es seguro es que habrá "más de dos candidatos". Y entretanto, la oposición se sigue enfrentando a su propia oposición interna en esta patera que sigue a la deriva mientras los polizones toman el mando de un capitán que está a punto de tirarse por la borda. ¿A que es normal la pelusilla? En fin, que me está dando vértigo y todavía ni hemos terminado 2013...
Un beso,
Ketty