Tres son las razones por las que una consulta popular para la aprobación de la nueva Constitución boliviana no tiene ningún valor legal ni moral:
Fraude Electoral. La confianza y transparencia de la Corte Nacional Electoral y del sistema electoral en manos del MAS han sufrido un grave deterioro por:
- La imposición de activistas del MAS en la Corte Nacional Electoral.
- Con la excusa de una campaña para erradicar el analfabetismo, funcionarios cubanos y venezolanos tomaron control del Registro de Ciudadanos para manipularlo.
- Se han demostrado graves distorsiones del Padrón Electoral en el Referéndum Revocatorio del 10 de agosto, lo que resta confianza a los resultados de futuras consultas electorales.
Ilegalidad del proceso de reforma constitucional. El proceso de aprobación del proyecto de la nueva constitución muestra violaciones que la tornan ilegal:
- La Ley de Necesidad de Reforma Constitucional del 2 de agosto de 2002 no considera la posibilidad de una asamblea constituyente.
- La Ley de Aprobación de reforma constitucional de marzo de 2004 impone la figura de la asamblea constituyente, la que por lo tanto es ilegal al no cumplir con los preceptos establecidos en el procedimiento de reforma constitucional. En consecuencia, es también ilegítima.
- La Asamblea Constituyente no respetó el precepto de la mayoría de 2/3. Para eludir esta disposición, no cumplió sus funciones en el plazo de un año y se auto-prorrogó.
- Vencido el nuevo plazo, y sin respetar la sede legal de sus funciones en el municipio de Sucre, la Asamblea Constituyente del MAS se trasladó a un liceo militar en el municipio de Yotala, anulando así la legalidad de sus decisiones.
- La aprobación tuvo lugar en medio de protestas de la población civil, reprimida por militares y por paramilitares entrenados y financiados por el Gobierno de Venezuela.
- Sin permitir el ingreso a los asambleistas de la oposición, aprobaron el proyecto en la sede militar.
- El proyecto fue ratificado en la ciudad de Oruro, en una sesión intempestiva de constituyentes del MAS, donde aprobaron más de 400 artículos en pocas horas.
- Para imponer el texto aprobado en Oruro y corregido en innumerables sesiones fuera de la Asamblea Constituyente, el Gobierno de Evo Morales presionó con marchas, amenazas y cercos al Congreso.
- La astucia, el uso de la fuerza bruta, el recurso constante a la mentira, las graves ofensas a la razón y al sentido común han logrado suplantar la legalidad de los procedimientos democráticos, la legitimidad del consenso ciudadano y la fe de un pueblo en sus instituciones, vaticinando el inevitable fracaso final del proyecto del MAS.
Contenido de una Constitución totalitaria. El proyecto del MAS, que ahora cuenta con la complicidad de los partidos de oposición en el Congreso Nacional, es un conjunto de textos tomados de las constituciones de la Unión Soviética y de Cuba comunista, con términos como "solidaridad", "justicia social", "equidad", etc. para conceder poderes omnipotentes al partido único y así:
- Apropiarse del poder durante varias generaciones, copiando el modelo cubano.
- Asegurarse de que el Gobierno pueda expoliar mediante leyes especiales la capacidad productiva del país: sería dueño único de los recursos naturales, de las fuentes de empleo, de los medios de transporte, de la tierra y de los sistemas de educación, para adoctrinar a las nuevas generaciones.
- Enmudece toda crítica al terminar con la libertad de prensa. El Estado de Derecho y las garantías ciudadanas desaparecen.
Por estas razones, el proyecto no logrará la legalidad que sus autores quieren imponer. Tampoco será legítimo porque no cuenta con el consenso mayoritario de la opinión ciudadana y está construido sobre engaños, mentiras, maniobras inmorales, conductas reprobables, violencia, sangre y muerte de compatriotas, todo lo cual le aseguran una efímera duración.