L D (EFE) La próxima semana, Brown, a quien "El Código da Vinci" ha convertido en multimillonario, debe comparecer ante un tribunal londinense para prestar testimonio a favor de la editorial Random House. El resultado del juicio puede tener repercusiones sobre la ley de "copyright", ya que establecerá hasta qué punto un autor puede tomar prestadas ideas de otro.
Si el juez da razón a los querellantes, éstos podrían tratar de obtener un mandamiento judicial que afectaría tanto a las ventas de la novela como a la propia película. Baigent y Leigh argumentan que la novela de Brown, una historia de conspiraciones y asesinatos, está basada en la teoría que ellos exponen en su propio libro, fruto de más de diez años de investigaciones.
Según los dos autores, Brown utilizó la hipótesis central de su libro: que Jesús se casó con María Magdalena, de la que tuvo un hijo, con lo que creó una línea de sangre que se encargarían de proteger a lo largo de los siglos sociedades secretas como los Caballeros Templarios. Baigent y Leigh sostienen que en "El Código Da Vinci" hay numerosas referencias específicas a su libro y citan como ejemplo el personaje de Leigh Teabing. Dicen que es un homenaje a ellos mismos: Leigh es Richard Leigh mientras que en Teabing aparecen en distinto orden las letras del apellido Baigent.