L D (EFE) Sólo la fragilidad defensiva de los azulgrana, todavía mayor ante la ausencia por lesión de Rodrigo de la Fuente, ha impedido que el encuentro se decidiese antes de llegar al descanso. El Lucentum ha pagado la escasa aportación de Velimir Perasovic, cuyos primeros puntos llegaron en el minuto siete, aunque su equipo soñara algunos minutos con, al menos, mantenerse en el partido hasta el final. Los escasos momentos de inspiración del escolta serbio colaboraron a encadenar un parcial de 0-5 al término del primer periodo, que se amplió a 0-9 en los inicios del segundo hasta situar por primera vez al cuadro alicantino con ventaja (21-22, min.12).
El panorama pintaba bien para el Lucentum hasta que la estrella del equipo rival, Dejan Bodiroga, despertó también y decantó de un golpe la balanza. Bodiroga no había anotado un sólo punto hasta bien mediado el segundo cuarto, pero sus dos primeros pusieron a los suyos por delante (32-31) en lo que supuso el inicio de un parcial de 8-2 que dejó las cosas en un 40-33 al descanso. Visto el camino que conducía a la victoria, el Barcelona decidió en un tercer periodo en el que apabulló a su rival, gracias sobre todo a su dominio bajo los tableros. El Lucentum vio como las ventajas de su rival alcanzaban con relativa facilidad los catorce puntos, diferencia que en ese cuarto se repitió hasta tres veces (54-40, 58-44 y 60-46).
El Barcelona tenía bastante para doblegar a un rival al que le faltaba la aportación de un Perasovic que pasó desapercibido en la segunda mitad. Un parcial de 7-2 en el último cuarto aumentó la ventaja de los suyos a diecinueve puntos (67-48) y el Lucentum bajó definitivamente los brazos para asistir a unos últimos minutos de espectáculo azulgrana, protagonizados principalmente por Gregor Fucka. Hasta 21 puntos por debajo (71-50 y 78-57) se vio el equipo alicantino, al que el campeón de Europa dio un severo correctivo, pero que se acoge a la condición de favorito del rival y a la nula importancia de las diferencias en una eliminatoria a cinco partidos.
El panorama pintaba bien para el Lucentum hasta que la estrella del equipo rival, Dejan Bodiroga, despertó también y decantó de un golpe la balanza. Bodiroga no había anotado un sólo punto hasta bien mediado el segundo cuarto, pero sus dos primeros pusieron a los suyos por delante (32-31) en lo que supuso el inicio de un parcial de 8-2 que dejó las cosas en un 40-33 al descanso. Visto el camino que conducía a la victoria, el Barcelona decidió en un tercer periodo en el que apabulló a su rival, gracias sobre todo a su dominio bajo los tableros. El Lucentum vio como las ventajas de su rival alcanzaban con relativa facilidad los catorce puntos, diferencia que en ese cuarto se repitió hasta tres veces (54-40, 58-44 y 60-46).
El Barcelona tenía bastante para doblegar a un rival al que le faltaba la aportación de un Perasovic que pasó desapercibido en la segunda mitad. Un parcial de 7-2 en el último cuarto aumentó la ventaja de los suyos a diecinueve puntos (67-48) y el Lucentum bajó definitivamente los brazos para asistir a unos últimos minutos de espectáculo azulgrana, protagonizados principalmente por Gregor Fucka. Hasta 21 puntos por debajo (71-50 y 78-57) se vio el equipo alicantino, al que el campeón de Europa dio un severo correctivo, pero que se acoge a la condición de favorito del rival y a la nula importancia de las diferencias en una eliminatoria a cinco partidos.