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Catorce años después, tres españoles suben al primer puesto del cajón en el Mundial de motociclismo

Desde la gesta hace casi dos décadas de Herri Torrontegui, Alex Crivillé y Sito Pons, no se había vuelto a lograr un pleno nacional en el Mundial de motociclismo. Este domingo, Daniel Pedrosa (125 c.c.), Toni Elías (250 c.c.) y Sete Gibernau (MotoGP) se han impuesto de forma magistral a sus rivales, siendo los primeros en ver la bandera de cuadros. Pleno español en el GP Francia, disputado en el circuito de Le Mans.

L D (EFE) Los pilotos españoles consiguieron tres victorias en las tres cilindradas del Gran Premio de Francia de motociclismo y que actualmente componen el campeonato del mundo para completar un día histórico en Le Mans. Después de unos entrenamientos no demasiado esclarecedores, la situación se disipó bastante en la jornada de carreras, pues la victoria de Daniel Pedrosa (Movistar Honda) resultó inapelable, en tanto que Toni Elías (Movistar Aprilia) encontró un difícil rival en el local Randy de Puniet (Aprilia), que buscaba el primer triunfo de su carrera deportiva y además ante su afición, y Sete Gibernau tuvo que centrar todo su esfuerzo en doblegar nada menos que a Valentino Rossi en una última vuelta impresionante.

Daniel Pedrosa fue quien más claro lo tuvo. Demostró una superioridad respecto a sus rivales incuestionable y ya en la segunda vuelta era el encargado de marcar el ritmo, un ritmo que ningún otro piloto pudo secundar y que a la postre le permitió subir a lo más alto del podio con casi tres segundos de adelanto sobre el veterano piloto italiano Lucio Cecchinello (Aprilia). El "efecto secundario" de esa victoria de Pedrosa fue la recuperación del liderato en la tabla de puntos del mundial, que ahora vuelve a encabezar con cinco puntos de ventaja sobre su más inmediato perseguidor, el propio Cecchinello, mientras que el hasta hoy líder, el alemán Steve Jenkner (Aprilia), falló estrepitosamente en su primera defensa al concluir octavo la prueba y no mostrar nunca la más mínima posibilidad de luchar por el triunfo.

La situación resultó algo más tormentosa para Antonio "Toni" Elías, pues su Movistar Aprilia le dio más de un quebradero de cabeza a lo largo del fin de semana francés, pero todo eso quedó aparcado en el momento que se apagó el semáforo en el circuito francés y el de Manresa dio muestras desde el primer momento de ser capaz de aspirar al triunfo. Lideró la prueba en las tres primeras vueltas, hasta que fue superado por el francés Randy de Puniet (Aprilia), quien probablemente tenía un acicate especial en el hecho de disputar el gran premio ante sus paisanos y le dejó hacer, pero ambos acabaron marchándose de todos sus rivales.

Cuando la situación estuvo "madura", Antonio Toni Elías superó sin demasiados problemas a de Puniet y también con cierta facilidad abrió un hueco que le encaminó decididamente hacia su segunda victoria del año y, lo que es más importante, con la caída del sanmarinense Manuel Poggiali (Aprilia), quien se comportó como un auténtico "membrillo" al colarse en una frenada y embestir por detrás al argentino Sebastián Porto (Movistar Honda), con el resultado de que ambos acabaron fuera de carrera, se acerca a sólo cinco puntos del liderato del mundial. Con Elías vencedor incuestionable, el madrileño Fonsi González Nieto (Movistar Aprilia), pudo redondear la jornada para su equipo y además recuperar buena parte de la moral perdida, pero tuvo un fallo clamoroso en la última vuelta que le dejó la puerta abierta a su rival Roberto Rolfo. El piloto de Honda no falló y superó en ese momento con claridad a Fonsi para hacerse con la tercera plaza y con ello propietario del último peldaño del podio.

Sin embargo, lo mejor estaba por llegar. Valentino Rossi (Honda RC 211 V) iba camino de su tercera victoria de la temporada de cuatro posibles, pero la lluvia y Sete Gibernau truncaron tal posibilidad con el nuevo reglamento en la mano. Al no existir diferencias horarias acumulables cuando la carrera tiene que ser detenida por la lluvia, Rossi, que era líder incuestionable en la primera parte de la carrera, se encontró con serias dificultades ante Alex Barros y el piloto de la Movistar Honda RC 211 V en la segunda. Rossi y Gibernau fueron los más avispados, junto con Barros, en la elección de los neumáticos para las trece vueltas que quedaban por disputarse y en la última de ellas ambos sacaron su garra a relucir, pero el español se mostró mucho más ambicioso que su rival y cerró un fin de semana histórico para el motociclismo español. en el Mundial, a sólo cinco puntos de Poggiali (Aprilia).

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