Menú

Mueren 62 militares españoles en un accidente de aviación en Turquía cuando regresaban de Afganistán

Sesenta y dos militares españoles murieron este lunes al estrellarse en Turquía un avión ucraniano en el que regresaban de Kabul. También fallecieron los doce ucranianos miembros de la tripulación. Los militares pertenecían al Ejército de Tierra (40), a la Fuerza Aérea (21) y también murió un comandante de la Guardia Civil. Las investigaciones apuntan a un posible error del piloto, aunque Defensa recalca que ha sido por la niebla.

L D (Agencias) Según Defensa, del Ejército de Tierra han fallecido un teniente coronel (Jefe del Contingente), cuatro comandantes, seis capitanes, cuatro tenientes, un subteniente, siete brigadas, siete sargentos primeros, seis sargentos, tres cabos primeros y un cabo. Al Ala 31 del Ejército del Aire, con base en Zaragoza, pertenecían un alférez, un subteniente, tres sargentos primeros, tres cabos primeros, un cabo y tres soldados, todos ellos del Escuadrón de Apoyo al Despliegue Aéreo (EADA). El comunicado añade que entre los fallecidos se encuentra un comandante de la Guardia Civil que prestaba sus servicios en la Fuerza Internacional de Asistencia y Seguridad en Afganistán (ISAF).

El personal del Ejército de Tierra estaba destinado en doce unidades distintas con bases en Burgos y Madrid, aunque parece ser que la mayoría pertenecía al Regimiento de Ingenieros número 1 de la División Mecanizada Brunete, con base en Castrillo del Val (Burgos). En el aparato viajaban también 9 militares del Ala 312 de la Base Aérea de Zaragoza y 12 del Escuadrón de Apoyo al Despliegue Aéreo (EADA), también con base en Zaragoza. El otro fallecido es Javier García Jimeno, un comandante de la Guardia Civil nacido en noviembre de 1966 en Ceuta, casado y con un hijo. Los cadáveres podrían repatriarse en las próximas 48 horas.

Regreso de Kabul con escala en Kirguizistán y Turquía

Según ha informado el Ministerio de Defensa, el avión, que había partido a las diez de la noche (hora española) de Kabul, se estrelló en las proximidades de la base de Trabzon (Noroeste de Turquía) a las 03.30 (hora española). Según Defensa, el avión se precipitó al suelo cuando intentaba tomar tierra, por tercera vez, debido a las fuertes turbulencias como consecuencia de las malas condiciones meteorológicas en la región, aunque otras investigaciones estudian un oposible error del piloto.

Los fallecidos regresaban a España tras pasar cuatro meses en Afganistán como parte de la cuarta agrupación española de la Fuerza Internacional de Asistencia a la Seguridad (ISAF). Pertenecían al segundo grupo del relevo de la IV Fuerza Española en Afganistán (ASPFOR IV). Los militares recibieron este domingo el relevo de la quinta agrupación española de la ISAF, llegados en el campamento de la ISAF, situado siete kilómetros al este de Kabul, y partieron del aeropuerto de la capital afgana de regreso a España a las 16.00 hora local (13.30 hora española).

Confusión por el avión alquilado

Sin embargo, hay cierta confusión en Defensa con respecto al aparato que transportaba a los soldados españoles. Primero, el Ministerio que dirige Federico Trillo informó de que el avión, un Yak-42 ucraniano, había sido alquilado a Ucrania por el Estado Mayor de la Defensa. Pero minutos más tarde dijo que el avión pertenecía a NAMSA, la agencia europea de la OTAN que utilizan para sus desplazamientos de larga distancia todos los países que integran la Fuerza Internacional de Asistencia a la Seguridad en Afganistán (ISAF). No obstante, el Ministerio de Defensa ucraniano afirma que el aparato era propiedad de las “Líneas Aéreas Mediterráneas”, una compañía local, según informa Víctor A. Cheretski a la redacción de Libertad Digital .

Un avión de 1975 de fabricación rusa

Por su parte, el ministro de Defensa, Federico Trillo, ha declarado que los aviones ucranianos Yak-42 son "excelentes, con plena garantía" y son "revisados por la propia Alianza Atlántica", con lo que vendría a aclarar que quien alquiló el aparato fue la propia OTAN a través de NAMSA, y no que el avión fuera de propiedad de la Alianza, ni que fuera alquilado por el Estado Mayor de la Defensa para transportar a los soldados españoles. Según el ministro, el accidente se produjo en medio de "circunstancias meteorológicas fortísimas de tormenta y niebla", que "hicieron imposible el primer intento de aterrizaje y aún el segundo, que ha despistado probablemente a los pilotos". "Esto requerirá una más que minuciosa investigación para averiguar las causas y depurar en su caso cualquier responsabilidad", precisó Trillo. Sin embargo, los Yak-42 son aviones rusos de 1975, que según fuentes de aviación están obsoletos y su mantenimiento es difícil por la escasez de piezas de repuesto en los mercados del Este.

El titular de Defensa hizo estas declaraciones en la base aérea de Torrejón de Ardoz (Madrid), poco antes de partir hacia Turquía (donde ya se encuentra) para coordinar desde allí las labores de investigación y repatriación de los militares españoles fallecidos en el accidente. Tras lamentar "el drama" de quienes "han dejado su vida al retornar a España tras cumplir su misión de ayuda humanitaria en Afganistán", el ministro expresó su confianza en poder repatriar los cuerpos en las próximas 48 horas, y señaló que las autoridades turcas han confirmado ya la "identificación o recuperación" de al menos 42 cadáveres.

Temas

En Internacional

    0
    comentarios