LD (EFE) "No estamos satisfechos con la actitud puesta de manifiesto por algunos miembros de la representación diplomática de tu país, y solicito explicaciones sobre este incidente", remarca Elorza, quien destacó en su misiva que Valdés se encontraba allí con el único propósito de informar, y que la agresión se produjo justo cuando se pretendía recabar la opinión del embajador acerca de una protesta que se desarrollaba ante la embajada de Cuba. Una portavoz de RTVE recordó además, en declaraciones a la agencia Europa Press , que después del incidente el funcionario cubano que agredió a Valdés se disculpó personalmente.
Los incidentes se produjeron cuando, al grito de "Fidel sí", personal de la embajada cubana en París se lió a golpes con los periodistas de Reporteros Sin Fronteras durante una protesta ante la embajada de Cuba por la situación de los derechos humanos en la isla. El cámara Cristian Valdés fue golpeado en el pómulo por personal de la legación cuando cubría la congregación de militantes de RSF, escritores cubanos exiliados como Zoe Valdés y Eduardo Manet, el autor español Fernando Arrabal e intelectuales franceses. Según dijo la corresponsalía de TVE en París, se presentará una protesta ante la embajada cubana por lo ocurrido, que el embajador cubano en París, Eumelio Caballero, justificó con el argumento de que habían sido provocados. "Cualquier cosa podía suceder" y el cámara español no llevaba un cartel que le identificara como tal, añadió el embajador.
Barras de hierro y martillos
Una treintena de personas acudieron hacia las 10.00 hora local a la representación diplomática cubana, con la intención de entregar a Caballero una carta para pedir la puesta en libertad de 26 periodistas recientemente detenidos y condenados a penas de hasta 27 años de cárcel. Ante el rechazo de Caballero a recibir a una delegación de RSF, los militantes de la organización cerraron con cadenas varias puertas de la embajada y luego se encadenaron con esposas. Fue entonces cuando empleados de la legación rompieron las cadenas con barras de hierro y martillos y se produjeron enfrentamientos con los miembros de RSF, varios de los cuales presentan heridas, hematomas y cortes, entre ellos el secretario general de la organización, Robert Ménard. Reporteros Sin Fronteras indicó que es la primera vez que se producen actos de violencia de este tipo en alguna de sus acciones, que suelen ser pacíficas, como la ocupación durante cuatro horas a principios de mes de la oficina de turismo cubana en París, en protesta por la ola de detenciones de disidentes en la isla.
Los incidentes obligaron a la Policía a desplegarse en la zona, aunque ya no pudo intervenir. Mientras los manifestantes gritaban lemas como "Cuba sí, Fidel no", los empleados de la Embajada coreaban "Fidel sí". En la protesta, los manifestantes llevaban camisetas y caretas con fotos de los periodistas detenidos, así como pancartas en las que se podía leer "Cuba = Prisión" o la frase del periodista y poeta cubano Raúl Rivero, condenado a comienzos de mes, "Yo no conspiro, escribo".
Además, la organización hizo pública una carta enviada la semana pasada al ministro francés de Asuntos Exteriores, Dominique de Villepin, en la que se critica a París por no aplicar en sus relaciones con La Habana "la posición común adoptada por la Unión Europea (UE), que condiciona la profundización de sus relaciones con Cuba al respeto del pluripartidismo y las libertades fundamentales". En varias ocasiones, RSF ha pedido a la Unión Europea que congele el examen de la demanda de adhesión de Cuba a los acuerdos de Cotonú, que rige las relaciones de la UE con los países ACP (Asia, Caribe y Pacífico).
Los incidentes se produjeron cuando, al grito de "Fidel sí", personal de la embajada cubana en París se lió a golpes con los periodistas de Reporteros Sin Fronteras durante una protesta ante la embajada de Cuba por la situación de los derechos humanos en la isla. El cámara Cristian Valdés fue golpeado en el pómulo por personal de la legación cuando cubría la congregación de militantes de RSF, escritores cubanos exiliados como Zoe Valdés y Eduardo Manet, el autor español Fernando Arrabal e intelectuales franceses. Según dijo la corresponsalía de TVE en París, se presentará una protesta ante la embajada cubana por lo ocurrido, que el embajador cubano en París, Eumelio Caballero, justificó con el argumento de que habían sido provocados. "Cualquier cosa podía suceder" y el cámara español no llevaba un cartel que le identificara como tal, añadió el embajador.
Barras de hierro y martillos
Una treintena de personas acudieron hacia las 10.00 hora local a la representación diplomática cubana, con la intención de entregar a Caballero una carta para pedir la puesta en libertad de 26 periodistas recientemente detenidos y condenados a penas de hasta 27 años de cárcel. Ante el rechazo de Caballero a recibir a una delegación de RSF, los militantes de la organización cerraron con cadenas varias puertas de la embajada y luego se encadenaron con esposas. Fue entonces cuando empleados de la legación rompieron las cadenas con barras de hierro y martillos y se produjeron enfrentamientos con los miembros de RSF, varios de los cuales presentan heridas, hematomas y cortes, entre ellos el secretario general de la organización, Robert Ménard. Reporteros Sin Fronteras indicó que es la primera vez que se producen actos de violencia de este tipo en alguna de sus acciones, que suelen ser pacíficas, como la ocupación durante cuatro horas a principios de mes de la oficina de turismo cubana en París, en protesta por la ola de detenciones de disidentes en la isla.
Los incidentes obligaron a la Policía a desplegarse en la zona, aunque ya no pudo intervenir. Mientras los manifestantes gritaban lemas como "Cuba sí, Fidel no", los empleados de la Embajada coreaban "Fidel sí". En la protesta, los manifestantes llevaban camisetas y caretas con fotos de los periodistas detenidos, así como pancartas en las que se podía leer "Cuba = Prisión" o la frase del periodista y poeta cubano Raúl Rivero, condenado a comienzos de mes, "Yo no conspiro, escribo".
Además, la organización hizo pública una carta enviada la semana pasada al ministro francés de Asuntos Exteriores, Dominique de Villepin, en la que se critica a París por no aplicar en sus relaciones con La Habana "la posición común adoptada por la Unión Europea (UE), que condiciona la profundización de sus relaciones con Cuba al respeto del pluripartidismo y las libertades fundamentales". En varias ocasiones, RSF ha pedido a la Unión Europea que congele el examen de la demanda de adhesión de Cuba a los acuerdos de Cotonú, que rige las relaciones de la UE con los países ACP (Asia, Caribe y Pacífico).