L D (EFE) Dos manifestaciones, una de partidarios y otra de opositores al gobierno del presidente Hugo Chávez y celebradas, ambas, en Petare, una populosa zona al este de Caracas considerada un bastión “chavista”, terminaron en fuertes disturbios en los que intervino la policía con el lanzamiento de gases lacrimógenos. La violencia dejó el saldo de un muerto, cinco heridos por arma de fuego, siete contusionados y decenas de intoxicados por los gases, incluidos los pacientes de un hospital ubicado en el centro de la zona en la que tuvieron lugar las concentraciones.
Tres personas que portaban armas de fuego fueron detenidas por la Policía, dos de ellos, según la emisora caraqueña “Unión Radio”, “admitieron ser miembros de los Círculos Bolivarianos”, calificados por la oposición como brigadas de choque “chavistas” y como grupos de trabajo social por el oficialismo.
Tres personas que portaban armas de fuego fueron detenidas por la Policía, dos de ellos, según la emisora caraqueña “Unión Radio”, “admitieron ser miembros de los Círculos Bolivarianos”, calificados por la oposición como brigadas de choque “chavistas” y como grupos de trabajo social por el oficialismo.