L D (EFE) Este jueves se ha reunido la Junta de Portavoces del Parlamento Vasco, pero no se trató el auto del Tribunal Supremo que insta a impedir la actividad parlamentaria del grupo Socialistas Abertzales. La reunión, en la que no participó el portavoz de la antigua Batasuna, Antton Morcillo, duró escasos minutos y en ella los representantes del PP y PSE, preguntaron al presidente de la Cámara, Juan María Atutxa, si se había recibido el citado auto. Atutxa, en los pasillos del Parlamento, explicó a algunos periodistas que no se había recibido y que esperará a tenerlo para tomar una decisión. Así, según explicó, se lo había comunicado a los portavoces parlamentarios en la reunión de la Junta.
Tras la reunión de la Junta de Portavoces, Juan María Atutxa y los representantes de los grupos que apoyan al Gobierno Vasco, Joseba Egibar (PNV), Rafael Larreina (Eusko Alkartasuna) y Oskar Matute (Izquierda Unida), mantuvieron una reunión en el despacho del primero para analizar la situación después de que el Tribunal Supremo ordenara este miércoles a Atutxa que impida la actividad parlamentaria del grupo de la antigua Batasuna, así como el embargo de sus cuentas corrientes y subvenciones.
Por su parte, el parlamentario del PP, Carlos Urquijo, denunció ante los periodistas en los pasillos del Parlamento vasco la "actitud contumaz y negligente de desobediencia" del presidente de la Cámara por no disolver de forma inmediata al grupo heredero de ETA-Batasuna, y consideró que Atutxa "poco a poco está cavando su propia tumba política". Por ello, le instó a cumplir el auto del Supremo, "por el bien de la institución", porque, además, "con su actitud consigue extender su responsabilidad a otras personas, como los funcionarios del Parlamento o los presidentes de las comisiones".
El portavoz del PSE, Rodolfo Ares, confío en que el presidente de la institución cumpla el auto del Tribunal Supremo, y advirtió de que, de no hacerlo, tendrá que "asumir responsabilidades penales y políticas" por provocar que el Parlamento Vasco "siga sumido en un conflicto, cuyos únicos responsables son PNV, EA, IU-EB y Atutxa". Rodolfo Ares también destacó que el Tribunal Supremo ha tenido una actitud "responsable, prudente y generosa" y señaló que "esperamos que Atutxa aproveche esta oportunidad y cumpla la sentencia".
Tras la reunión de la Junta de Portavoces, Juan María Atutxa y los representantes de los grupos que apoyan al Gobierno Vasco, Joseba Egibar (PNV), Rafael Larreina (Eusko Alkartasuna) y Oskar Matute (Izquierda Unida), mantuvieron una reunión en el despacho del primero para analizar la situación después de que el Tribunal Supremo ordenara este miércoles a Atutxa que impida la actividad parlamentaria del grupo de la antigua Batasuna, así como el embargo de sus cuentas corrientes y subvenciones.
Por su parte, el parlamentario del PP, Carlos Urquijo, denunció ante los periodistas en los pasillos del Parlamento vasco la "actitud contumaz y negligente de desobediencia" del presidente de la Cámara por no disolver de forma inmediata al grupo heredero de ETA-Batasuna, y consideró que Atutxa "poco a poco está cavando su propia tumba política". Por ello, le instó a cumplir el auto del Supremo, "por el bien de la institución", porque, además, "con su actitud consigue extender su responsabilidad a otras personas, como los funcionarios del Parlamento o los presidentes de las comisiones".
El portavoz del PSE, Rodolfo Ares, confío en que el presidente de la institución cumpla el auto del Tribunal Supremo, y advirtió de que, de no hacerlo, tendrá que "asumir responsabilidades penales y políticas" por provocar que el Parlamento Vasco "siga sumido en un conflicto, cuyos únicos responsables son PNV, EA, IU-EB y Atutxa". Rodolfo Ares también destacó que el Tribunal Supremo ha tenido una actitud "responsable, prudente y generosa" y señaló que "esperamos que Atutxa aproveche esta oportunidad y cumpla la sentencia".