LD (Agencias) Un atentado terrorista contra un autobús que transportaba personal del Ministerio ruso de Interior ha provocado la muerte de tres policías y heridas a otros siete. La bomba fue accionada cuando el vehículo se detuvo en un puesto de control en territorio de Osetia del Norte, a pocos kilómetros de la frontera ingush. En los últimos meses, terroristas chechenos han intensificado los ataques contra las tropas y fuerzas policiales rusas en las repúblicas vecinas de Chechenia, especialmente en Osetia del Norte y la república de Ingushetia. Este miércoles, otros tres policías murieron en un ataque en Grozni.
Fuentes del mando de las tropas rusas emplazadas en la república separatista informaron este jueves de que al menos siete terroristas islámicos murieron en dos choques armados en Chechenia en las últimas veinticuatro horas. Además, el Kremlin anunció que el mando militar en Chechenia será traspasado del Servicio Federal de Seguridad (antiguo KGB) al Ministerio del Interior, pues en la república "no se llevan a cabo operaciones militares de envergadura". Según los planes de Moscú, el traspaso del mando deberá completarse antes del próximo uno de septiembre.
El Kremlin afirma que el conflicto checheno, que en casi cuatro años se ha cobrado decenas de miles de muertos, en su mayoría entre la población civil, ha entrado en un "proceso de arreglo político", aunque Moscú niega cualquier posibilidad de negociación con los separatistas.
Fuentes del mando de las tropas rusas emplazadas en la república separatista informaron este jueves de que al menos siete terroristas islámicos murieron en dos choques armados en Chechenia en las últimas veinticuatro horas. Además, el Kremlin anunció que el mando militar en Chechenia será traspasado del Servicio Federal de Seguridad (antiguo KGB) al Ministerio del Interior, pues en la república "no se llevan a cabo operaciones militares de envergadura". Según los planes de Moscú, el traspaso del mando deberá completarse antes del próximo uno de septiembre.
El Kremlin afirma que el conflicto checheno, que en casi cuatro años se ha cobrado decenas de miles de muertos, en su mayoría entre la población civil, ha entrado en un "proceso de arreglo político", aunque Moscú niega cualquier posibilidad de negociación con los separatistas.