(Libertad Digital) Esta renovación afectará a 35 de los 52 fiscales jefes existentes –en aplicación del nuevo Estatuto, que limita a cinco años sus mandatos– aunque las salidas más sonoras serán las de Carlos Jiménez Villarejo, fiscal jefe Anticorrupción desde que el 13 de octubre de 1995 fuese nombrado por el Consejo de Ministros de Felipe González, y Mariano Fernández Bermejo, fiscal jefe de Madrid, nombrado por Eligio Hernández en un acto declarado ilegal por el Tribunal Supremo, y con la oposición unánime del Consejo Fiscal.
Jiménez Villarejo lleva ocho años al frente de la Fiscalía Anticorrupción, en una gestión marcada por la polémica, por sus enfrentamientos con el fiscal general del Estado, Jesús Cardenal, y por sus intentos innumerables para politizar la justicia o judicializar la política, mientras que Fernández Bermejo también ha sido centro de atención debido a sus críticas a la Ley de Juicios Rápidos, que han derivado en la apertura de diligencias informativas en la Fiscalía General. Sus enfrentamientos con el ministro de Justicia culminaron recientemente en una demanda contra el honor interpuesta por el fiscal. Además, en los últimos días, desde que se desató la crisis política de Madrid, los dos se han apresurado a tomar iniciativas para intentar hacerse con la investigación.
Según informa la agencia Efe , la renovación de los 35 fiscales jefe, incluidos Villarejo y Bermejo, se estudiará en un Consejo Fiscal que se convocará en julio, una vez se hayan presentado las candidaturas a las plazas que quedarán vacantes. Después de que los vocales del Consejo Fiscal, compuesto por doce miembros, voten a los candidatos que consideren más válidos para esos puestos, el fiscal general del Estado, Jesús Cardenal, hará su propuesta al respecto, que puede ser contraria a la del Consejo. La propuesta Cardenal, que es quien tiene la última palabra en materia de nombramientos, será la que posteriormente reciba el Consejo de Ministros para su aprobación y no será hasta su publicación en el Boletín Oficial del Estado cuando los elegidos puedan acceder a sus cargos.
Tanto Carlos Jiménez Villarejo como del fiscal jefe de Madrid han anunciado que optarán a su reelección, aunque previsiblemente no serán propuestos por Jesús Cardenal. Los fiscales jefes que no hayan cumplido todavía cinco años en el cargo continuarán en el mismo hasta que cumpla ese plazo, que se computa desde la fecha de su nombramiento.
Jiménez Villarejo lleva ocho años al frente de la Fiscalía Anticorrupción, en una gestión marcada por la polémica, por sus enfrentamientos con el fiscal general del Estado, Jesús Cardenal, y por sus intentos innumerables para politizar la justicia o judicializar la política, mientras que Fernández Bermejo también ha sido centro de atención debido a sus críticas a la Ley de Juicios Rápidos, que han derivado en la apertura de diligencias informativas en la Fiscalía General. Sus enfrentamientos con el ministro de Justicia culminaron recientemente en una demanda contra el honor interpuesta por el fiscal. Además, en los últimos días, desde que se desató la crisis política de Madrid, los dos se han apresurado a tomar iniciativas para intentar hacerse con la investigación.
Según informa la agencia Efe , la renovación de los 35 fiscales jefe, incluidos Villarejo y Bermejo, se estudiará en un Consejo Fiscal que se convocará en julio, una vez se hayan presentado las candidaturas a las plazas que quedarán vacantes. Después de que los vocales del Consejo Fiscal, compuesto por doce miembros, voten a los candidatos que consideren más válidos para esos puestos, el fiscal general del Estado, Jesús Cardenal, hará su propuesta al respecto, que puede ser contraria a la del Consejo. La propuesta Cardenal, que es quien tiene la última palabra en materia de nombramientos, será la que posteriormente reciba el Consejo de Ministros para su aprobación y no será hasta su publicación en el Boletín Oficial del Estado cuando los elegidos puedan acceder a sus cargos.
Tanto Carlos Jiménez Villarejo como del fiscal jefe de Madrid han anunciado que optarán a su reelección, aunque previsiblemente no serán propuestos por Jesús Cardenal. Los fiscales jefes que no hayan cumplido todavía cinco años en el cargo continuarán en el mismo hasta que cumpla ese plazo, que se computa desde la fecha de su nombramiento.