L D (EFE) La niña fue secuestrada el 28 de noviembre de 2001 en Madrid, donde vivía con su madre, a la que arrebató por la fuerza y bajo amenazas a la menor que entonces contaba 5 años, según informó una nota de la Guardia Civil. Desde la fecha del secuestro, J.L.C.B., de 42 años, detenido anteriormente en otras seis ocasiones por delitos relativos a la prostitución y contra el patrimonio, permanecía en paradero desconocido, así como su hija, que compartía el zulo con tres mujeres que trabajaban en dos clubes de alterne, de Loja y de Villanueva del Trabuco (Málaga) y con un hombre, encargado de trasladarlas.
La operación arrancó hace semanas cuando la Guardia Civil de Loja conoció que el individuo frecuentaba clubes de alterne de la comarca y de la vecina Málaga. Posteriormente, los agentes del equipo de la Policía Judicial de la Guardia Civil siguieron una pista que apuntaba a que el secuestrador podía encontrarse en unas naves industriales que, hace años, albergaban negocios de cría de champiñones, en las afueras de Loja. La Guardia Civil solicitó entonces un mandamiento de entrada y registro para poder acceder a las naves al Juzgado de Instrucción número 40 de Madrid, que autorizó la operación.
En el registro de las naves, los agentes localizaron una pared falsa en una de ellas que escondía una puerta camuflada que comunicaba con un zulo, en el que se ocultaba la hija y su padre, que ofreció una dura resistencia a ser detenido, según la nota de la Guardia Civil. Los agentes comprobaron posteriormente que el detenido había instalado en las naves cámaras de vigilancia por las que vio llegar a los guardias civiles, aunque no le dio tiempo de huir pero sí de esconderse.
La Guardia Civil aporta que en el momento de la detención el individuo sólo vestía unos calzoncillos y la niña estaba descalza, lo que indica para el instituto armado que trataba de escapar con lo puesto. La niña, que según la Guardia Civil ha permanecido en "condiciones lamentables" durante el secuestro, ha sido entregada al Servicio de Protección de Menores de la Junta de Andalucía.
La operación arrancó hace semanas cuando la Guardia Civil de Loja conoció que el individuo frecuentaba clubes de alterne de la comarca y de la vecina Málaga. Posteriormente, los agentes del equipo de la Policía Judicial de la Guardia Civil siguieron una pista que apuntaba a que el secuestrador podía encontrarse en unas naves industriales que, hace años, albergaban negocios de cría de champiñones, en las afueras de Loja. La Guardia Civil solicitó entonces un mandamiento de entrada y registro para poder acceder a las naves al Juzgado de Instrucción número 40 de Madrid, que autorizó la operación.
En el registro de las naves, los agentes localizaron una pared falsa en una de ellas que escondía una puerta camuflada que comunicaba con un zulo, en el que se ocultaba la hija y su padre, que ofreció una dura resistencia a ser detenido, según la nota de la Guardia Civil. Los agentes comprobaron posteriormente que el detenido había instalado en las naves cámaras de vigilancia por las que vio llegar a los guardias civiles, aunque no le dio tiempo de huir pero sí de esconderse.
La Guardia Civil aporta que en el momento de la detención el individuo sólo vestía unos calzoncillos y la niña estaba descalza, lo que indica para el instituto armado que trataba de escapar con lo puesto. La niña, que según la Guardia Civil ha permanecido en "condiciones lamentables" durante el secuestro, ha sido entregada al Servicio de Protección de Menores de la Junta de Andalucía.