L D (EFE) Al término del consejo de administración, que celebrado en la tarde de este martes en el estadio de El Sardinero, Santiago Díaz anunciaba que ha sido nombrado presidente por unanimidad, aunque luego Dimitri Piterman precisaba que su mandato puede que sea transitorio. De hecho, el empresario estadounidense de origen ucraniano tiene intención de comprar en los próximos días las acciones que necesita para contar con la mayoría en el consejo y recuperar así el cargo de presidente del club cántabro.
Piterman presidía el Racing de Santander desde el pasado 18 de enero, cuando adquirió el 24,6 por ciento de su capital social en un momento especialmente crítico para la entidad, que en aquellos momentos ya había iniciado su proceso formal de disolución. El conjunto cántabro evitó la disolución dos semanas después, suscribiendo con Caja Cantabria un crédito participativo de 10,81 millones de euros, avalado en su mayor parte por el propio Piterman (32,80%), por Santiago Díaz (37,06%, parte personalmente y el resto a través de sus empresas) y por el hermano del empresario cántabro, Fernando Díaz (10%).
El sábado pasado, el empresario estadounidense expresó claramente su opinión sobre la gestión del club, que calificó de "horrible y absurda", con unas declaraciones que indignaron a Santiago Díaz, el hombre fuerte del Racing durante los últimos años, porque cargaban directamente contra su hijo, el consejero Santiago Díaz Zavala. Santiago Díaz padre asume por primera vez la presidencia de un club que controla desde hace años, aunque siempre a través de otras personas de su confianza, como en su momento fueron los presidentes Miguel Ángel Díaz (su hermano), Ángel Gutiérrez Coterillo y, durante unos meses, el propio Piterman.
"Presidente novel"
"Piterman ha comprendido que, tal como estaba la situación ahora mismo, esto era lo más conveniente para todos y así lo hemos entendido los demás. La reunión ha sido normal, en términos correctos y con todo el mundo dispuesto a trabajar para buscar lo mejor para el club. Es una etapa más", ha declarado Díaz. Este empresario cántabro, que posee uno de los grupos constructores más importantes de la región, eludió dar más explicaciones hasta la conferencia de prensa que ofrecerá mañana, porque hasta este momento "nunca" había pensado en ser presidente. "Soy un presidente novel y tengo que pensarme las cosas", añade.
Piterman ha confesado que las diferencias que le separan con los accionistas mayoritarios "claramente no se solucionan en un día" y considera que, en estas circunstancias, era indiferente que él renunciara o no al cargo, porque "el que tiene la mayoría tiene la mayoría", sentenciaba. Sin embargo, también precisaba que Díaz y él han pactado concederse una semana en la que el club no tomará ninguna decisión importante. "El pacto es que yo dimito presidente y él asume el cargo con el compromiso de que durante esta semana no se hace ninguna cosa de importancia, como un fichaje, un traspaso, un entrenador... Espero que dentro de muy, muy pocos días podré ejecutar la opción de compra y después tengo claro que voy a reorganizar el consejo de administración", declaraba el empresario estadounidense.
Los avales, en poder de Piterman
También ha anunciado que ya tiene en su poder los avales que está obligado a aportar ante Caja Cantabria para sustituir a las garantías prestadas por Santiago Díaz al firmar el crédito participativo, en el caso de que le compre las acciones. Piterman opina que ahora sólo es cuestión de "trámites" que pueda hacerse con el control del club y recuperar el cargo -"puede ser mañana, el jueves o el próximo lunes", dice-, aunque también reconoció que si Caja Cantabria no aceptase sus avales, lo lógico sería que Santiago Díaz siguiera como presidente del club. Entretanto, él viajará con la plantilla este fin de semana a Hungría en calidad delegado del equipo para disputar el partido de vuelta de la eliminatoria de la Intertoto contra el Gyori Eto.
Piterman presidía el Racing de Santander desde el pasado 18 de enero, cuando adquirió el 24,6 por ciento de su capital social en un momento especialmente crítico para la entidad, que en aquellos momentos ya había iniciado su proceso formal de disolución. El conjunto cántabro evitó la disolución dos semanas después, suscribiendo con Caja Cantabria un crédito participativo de 10,81 millones de euros, avalado en su mayor parte por el propio Piterman (32,80%), por Santiago Díaz (37,06%, parte personalmente y el resto a través de sus empresas) y por el hermano del empresario cántabro, Fernando Díaz (10%).
El sábado pasado, el empresario estadounidense expresó claramente su opinión sobre la gestión del club, que calificó de "horrible y absurda", con unas declaraciones que indignaron a Santiago Díaz, el hombre fuerte del Racing durante los últimos años, porque cargaban directamente contra su hijo, el consejero Santiago Díaz Zavala. Santiago Díaz padre asume por primera vez la presidencia de un club que controla desde hace años, aunque siempre a través de otras personas de su confianza, como en su momento fueron los presidentes Miguel Ángel Díaz (su hermano), Ángel Gutiérrez Coterillo y, durante unos meses, el propio Piterman.
"Presidente novel"
"Piterman ha comprendido que, tal como estaba la situación ahora mismo, esto era lo más conveniente para todos y así lo hemos entendido los demás. La reunión ha sido normal, en términos correctos y con todo el mundo dispuesto a trabajar para buscar lo mejor para el club. Es una etapa más", ha declarado Díaz. Este empresario cántabro, que posee uno de los grupos constructores más importantes de la región, eludió dar más explicaciones hasta la conferencia de prensa que ofrecerá mañana, porque hasta este momento "nunca" había pensado en ser presidente. "Soy un presidente novel y tengo que pensarme las cosas", añade.
Piterman ha confesado que las diferencias que le separan con los accionistas mayoritarios "claramente no se solucionan en un día" y considera que, en estas circunstancias, era indiferente que él renunciara o no al cargo, porque "el que tiene la mayoría tiene la mayoría", sentenciaba. Sin embargo, también precisaba que Díaz y él han pactado concederse una semana en la que el club no tomará ninguna decisión importante. "El pacto es que yo dimito presidente y él asume el cargo con el compromiso de que durante esta semana no se hace ninguna cosa de importancia, como un fichaje, un traspaso, un entrenador... Espero que dentro de muy, muy pocos días podré ejecutar la opción de compra y después tengo claro que voy a reorganizar el consejo de administración", declaraba el empresario estadounidense.
Los avales, en poder de Piterman
También ha anunciado que ya tiene en su poder los avales que está obligado a aportar ante Caja Cantabria para sustituir a las garantías prestadas por Santiago Díaz al firmar el crédito participativo, en el caso de que le compre las acciones. Piterman opina que ahora sólo es cuestión de "trámites" que pueda hacerse con el control del club y recuperar el cargo -"puede ser mañana, el jueves o el próximo lunes", dice-, aunque también reconoció que si Caja Cantabria no aceptase sus avales, lo lógico sería que Santiago Díaz siguiera como presidente del club. Entretanto, él viajará con la plantilla este fin de semana a Hungría en calidad delegado del equipo para disputar el partido de vuelta de la eliminatoria de la Intertoto contra el Gyori Eto.