LD (Agencias) El portavoz rebelde Kabineh Ja'neh, declaró a la cadena británica BBC que “nuestro jefe le pidió a nuestras fuerzas que contengan sus movimientos”. En tanto, testigos indicaron que los combates perdieron fuerza este domingo, mientras algunos vecinos comenzaron a volver a sus hogares, luego de refugiarse en la capital ante el avance de los rebeldes. Altas fuentes militares confirmaron este domingo que el LURD se apoderó el sábado el puente de St. Paul, la principal entrada occidental a la ciudad, y que avanzaron a través de los suburbios en dirección al puerto, en medio de fuertes combates.
En el centro de Monrovia cayó fuego de mortero mientras miles de civiles huían de sus casas por tercera vez en menos de dos meses. Las calles que llevan al centro de la ciudad estaban llenas de gente que portaba fardos y colchones en la cabeza, en escenas que recordaban las dos ofensivas anteriores del LURD en junio, cuando cientos de personas murieron, miles resultaron heridas y decenas de miles fueron desplazadas de sus hogares.
Pese al llamamiento al cese de las hostilidades que hizo el sábado por la noche el embajador estadounidense John Blaney, los rebeldes prosiguieron su ofensiva hacia la capital. Según el Ministro liberiano de Defensa, Daniel Chea, las fuerzas gubernamentales ganaron terreno en la gran batalla del domingo por el control de los puentes Gabriel Tucker y Old Bridge, por los que se accede al corazón de la ciudad. “Los estamos rechazando y nuestras fuerzas están a menos de un kilómetro del puerto”, controlado por el LURD desde el sábado. “Defenderemos Monrovia calle por calle, no nos detendremos hasta que no los hayamos echado. No tienen nada que hacer aquí”, dijo Chea.
En el centro de Monrovia cayó fuego de mortero mientras miles de civiles huían de sus casas por tercera vez en menos de dos meses. Las calles que llevan al centro de la ciudad estaban llenas de gente que portaba fardos y colchones en la cabeza, en escenas que recordaban las dos ofensivas anteriores del LURD en junio, cuando cientos de personas murieron, miles resultaron heridas y decenas de miles fueron desplazadas de sus hogares.
Pese al llamamiento al cese de las hostilidades que hizo el sábado por la noche el embajador estadounidense John Blaney, los rebeldes prosiguieron su ofensiva hacia la capital. Según el Ministro liberiano de Defensa, Daniel Chea, las fuerzas gubernamentales ganaron terreno en la gran batalla del domingo por el control de los puentes Gabriel Tucker y Old Bridge, por los que se accede al corazón de la ciudad. “Los estamos rechazando y nuestras fuerzas están a menos de un kilómetro del puerto”, controlado por el LURD desde el sábado. “Defenderemos Monrovia calle por calle, no nos detendremos hasta que no los hayamos echado. No tienen nada que hacer aquí”, dijo Chea.