(Libertad Digital) El subdelegado Gobierno en Málaga, Carlos Rubio, ha dicho que "siempre hay que estar alerta ante el terrorismo" y recordó que a principios de verano se marcó los objetivos de "atención al turista y prevención contra los actos terroristas". Rubio, que hace unas semanas confirmó que los etarras que atentaron contra hoteles en Benidorm y Alicante, Asier Ezeiza y Joseba Troitiño, hicieron reservas en dos hoteles de Málaga y Torremolinos, dijo que "desgraciadamente la experiencia demuestra que ETA utiliza nuestra provincia para cometer atentados, por lo que los agentes siempre están alerta", según informa la agencia Efe .
Entre los agentes de la lucha antiterrorista se ha distribuido recientemente un informe de la Unidad Central de Inteligencia de la Comisaría General de Información de la Policía Nacional en el que se detallan los nuevos usos y costumbres de los pistoleros de ETA. El documento, de siete folios y desvelado por el diario El Mundo , afirma que “el análisis de las documentaciones intervenidas en Francia durante los últimos meses pone de manifiesto que los activistas desplazados desde Francia para cometer este tipo de acciones no limitan su estancia únicamente a aquellas provincias en las que van a cometer acciones, sino que aprovechan su presencia en otra serie de ellas para elaborar informaciones” que, se supone, servirán en el futuro para cometer otros atentados.
Se hacen pasar por turistas
En cuanto al modo de actuar de los comandos de ETA en verano, el informe detalla que sus actuaciones “han variado notablemente en los últimos tiempos”. Así, según el mencionado documento, “hace apenas dos años, los encargados de la comisión de atentados solían tratarse de miembros legales (no fichados y a sueldo de ETA) que, aprovechando esta cobertura, se trasladaban con total impunidad”. Sin embargo, “a partir de la última campaña de verano, desarrollada el pasado 2002, han variado notablemente su forma de actuar. De las acciones se encargan unos comandos itinerantes a los que la organización designa con el nombre de Basauntzas , cuya composición, estructura y funcionamiento les permite una movilidad e invulnerabilidad que nos hace suponer que será el modelo utilizado por la organización en un futuro inmediato”.
El dato en el que más inciden en su informe es el hecho de que los comandos de ETA basan su actuación en “cortas estancias, de apenas unos pocos días, en una misma localidad”. Según el documento, los etarras alquilan un alojamiento para menos días de los que están. Es decir, la Unidad Central de Inteligencia considera que el comando, cuando llega a un lugar, pasa al menos una noche en su propio coche. Al día siguiente se registran en un hotel, motel o camping y allí apenas se quedan dos o tres días y abandonan la población. Ante la posibilidad de que los etarras se registren en algún establecimiento, el servicio de inteligencia policial recomienda a las comisarías en alerta durante la llamada “campaña de verano” de ETA que “resulta sumamente importante el control de estos establecimientos”, según el informe.
Otro de los aspectos destacados se refiere al alquiler de vehículos por parte de los integrantes de los comandos. Destaca que los etarras alquilan “bien un turismo tipo utilitario, o bien una motocicleta o un ciclomotor”. Los especialistas indican también que los integrantes de la organización terrorista que participan en la denominada “campaña de verano” utilizan los medios de transporte como el tren o autobuses para realizar desplazamientos. Así, piden a todas las plantillas policiales que utilicen “el álbum general de huidos, en el cual se han incluido las fotografías de aquellos etarras de los que se sospecha su posible participación en la campaña” para intentar su localización.
Entre los agentes de la lucha antiterrorista se ha distribuido recientemente un informe de la Unidad Central de Inteligencia de la Comisaría General de Información de la Policía Nacional en el que se detallan los nuevos usos y costumbres de los pistoleros de ETA. El documento, de siete folios y desvelado por el diario El Mundo , afirma que “el análisis de las documentaciones intervenidas en Francia durante los últimos meses pone de manifiesto que los activistas desplazados desde Francia para cometer este tipo de acciones no limitan su estancia únicamente a aquellas provincias en las que van a cometer acciones, sino que aprovechan su presencia en otra serie de ellas para elaborar informaciones” que, se supone, servirán en el futuro para cometer otros atentados.
Se hacen pasar por turistas
En cuanto al modo de actuar de los comandos de ETA en verano, el informe detalla que sus actuaciones “han variado notablemente en los últimos tiempos”. Así, según el mencionado documento, “hace apenas dos años, los encargados de la comisión de atentados solían tratarse de miembros legales (no fichados y a sueldo de ETA) que, aprovechando esta cobertura, se trasladaban con total impunidad”. Sin embargo, “a partir de la última campaña de verano, desarrollada el pasado 2002, han variado notablemente su forma de actuar. De las acciones se encargan unos comandos itinerantes a los que la organización designa con el nombre de Basauntzas , cuya composición, estructura y funcionamiento les permite una movilidad e invulnerabilidad que nos hace suponer que será el modelo utilizado por la organización en un futuro inmediato”.
El dato en el que más inciden en su informe es el hecho de que los comandos de ETA basan su actuación en “cortas estancias, de apenas unos pocos días, en una misma localidad”. Según el documento, los etarras alquilan un alojamiento para menos días de los que están. Es decir, la Unidad Central de Inteligencia considera que el comando, cuando llega a un lugar, pasa al menos una noche en su propio coche. Al día siguiente se registran en un hotel, motel o camping y allí apenas se quedan dos o tres días y abandonan la población. Ante la posibilidad de que los etarras se registren en algún establecimiento, el servicio de inteligencia policial recomienda a las comisarías en alerta durante la llamada “campaña de verano” de ETA que “resulta sumamente importante el control de estos establecimientos”, según el informe.
Otro de los aspectos destacados se refiere al alquiler de vehículos por parte de los integrantes de los comandos. Destaca que los etarras alquilan “bien un turismo tipo utilitario, o bien una motocicleta o un ciclomotor”. Los especialistas indican también que los integrantes de la organización terrorista que participan en la denominada “campaña de verano” utilizan los medios de transporte como el tren o autobuses para realizar desplazamientos. Así, piden a todas las plantillas policiales que utilicen “el álbum general de huidos, en el cual se han incluido las fotografías de aquellos etarras de los que se sospecha su posible participación en la campaña” para intentar su localización.