L D (Agencias) La ministra de Asuntos Exteriores, Ana Palacio, ha reafirmado en el Congreso el compromiso de España para luchar contra el terrorismo internacional en Irak. "El pueblo de Irak nos necesita y los fanáticos y los violentos que asesinaron a Sergio Vieira de Mello y al capitán de navío Manuel Martín-Oar no van a dictar lo que pase en Irak", dijo la ministra ante la Comisión de Asuntos Exteriores, parafraseando al secretario general de la ONU, Kofi Annan. Palacio compareció, a petición propia, en una sesión extraordinaria de esta comisión, para informar del atentado del pasado 19 de agosto contra la sede de la ONU en Bagdad, en el que murió el comisionado de la ONU y el militar español, que trabajaba para Naciones Unidas en tareas de ayuda humanitaria a la población.
La titular de Exteriores comenzó su exposición con un homenaje a ambas víctimas y continuó recordando los datos ya difundidos sobre su fallecimiento, no conocido hasta el día siguiente del ataque. Ana Palacio dijo que incluso se dieron por muertas a personas que después se supo que habían sobrevivido e incidió en que la condición de civil de Martín-Oar complicó su localización, al igual que el hecho de que se buscara a una persona herida y no fallecida. Según manifestó, "las informaciones proporcionadas en las primeras horas, desgraciadamente, no reflejaron la penosa realidad del fallecimiento del capitán de navío. Soy la primera en lamentarlo, especialmente ante sus familiares y allegados, por las expectativas tan dolorosamente truncadas".
Las tropas en Irak no son “ocupantes”
La ministra atribuyó a un "cúmulo de circunstancias adversas, connaturales a un ataque terrorista de tal magnitud", junto a la "preocupación por conocer el paradero de los demás españoles en Bagdad", el hecho de no se dispusiera de la "noticia puntual" de su muerte, y ello a pesar de la colaboración de las autoridades de EEUU. Sobre la investigación de este ataque "inédito y sin precedentes" contra la ONU, Ana Palacio recordó que existen dos líneas de investigación respecto a su autoría, atribuida a grupos afines a Sadam Husein o bien a facciones radicales islámicas. Pero sea quien sea el autor, la ministra destacó que "no podemos permitir que una minoría de violentos ponga en peligro la reconstrucción de Irak" y dijo que las dificultades que puedan poner los terroristas y "secuaces" de Sadam "están condenadas al fracaso".
Palacio también informó a los grupos parlamentarios sobre el envío de 1.360 militares españoles a Irak, una decisión que según remarcó tiene su "base jurídica" en la resolución 1.483 del Consejo de Seguridad de Naciones Unidas, para aclarar a continuación que las tropas no están allí en calidad de miembros de "potencias ocupantes", sino para efectuar tareas "en el marco de la autoridad" provisional establecida por la Coalición, a la que la propia ONU otorgó la cualidad de Autoridad en Irak a través de la resolución 1.483. Sobre la petición de la oposición para que España apoye el papel preponderante de la ONU en Irak, Palacio dijo que "el Gobierno será incansable en su tarea de apoyar la labor fundamental que las Naciones Unidas deben desempeñar en el presente y futuro de Irak".
En cuanto al futuro de este país, destacó el apoyo que debe prestarse al Consejo de Gobierno iraquí y apuntó que el establecimiento de un calendario para aprobar una Constitución y celebrar elecciones libres es algo "esencial".
La titular de Exteriores comenzó su exposición con un homenaje a ambas víctimas y continuó recordando los datos ya difundidos sobre su fallecimiento, no conocido hasta el día siguiente del ataque. Ana Palacio dijo que incluso se dieron por muertas a personas que después se supo que habían sobrevivido e incidió en que la condición de civil de Martín-Oar complicó su localización, al igual que el hecho de que se buscara a una persona herida y no fallecida. Según manifestó, "las informaciones proporcionadas en las primeras horas, desgraciadamente, no reflejaron la penosa realidad del fallecimiento del capitán de navío. Soy la primera en lamentarlo, especialmente ante sus familiares y allegados, por las expectativas tan dolorosamente truncadas".
Las tropas en Irak no son “ocupantes”
La ministra atribuyó a un "cúmulo de circunstancias adversas, connaturales a un ataque terrorista de tal magnitud", junto a la "preocupación por conocer el paradero de los demás españoles en Bagdad", el hecho de no se dispusiera de la "noticia puntual" de su muerte, y ello a pesar de la colaboración de las autoridades de EEUU. Sobre la investigación de este ataque "inédito y sin precedentes" contra la ONU, Ana Palacio recordó que existen dos líneas de investigación respecto a su autoría, atribuida a grupos afines a Sadam Husein o bien a facciones radicales islámicas. Pero sea quien sea el autor, la ministra destacó que "no podemos permitir que una minoría de violentos ponga en peligro la reconstrucción de Irak" y dijo que las dificultades que puedan poner los terroristas y "secuaces" de Sadam "están condenadas al fracaso".
Palacio también informó a los grupos parlamentarios sobre el envío de 1.360 militares españoles a Irak, una decisión que según remarcó tiene su "base jurídica" en la resolución 1.483 del Consejo de Seguridad de Naciones Unidas, para aclarar a continuación que las tropas no están allí en calidad de miembros de "potencias ocupantes", sino para efectuar tareas "en el marco de la autoridad" provisional establecida por la Coalición, a la que la propia ONU otorgó la cualidad de Autoridad en Irak a través de la resolución 1.483. Sobre la petición de la oposición para que España apoye el papel preponderante de la ONU en Irak, Palacio dijo que "el Gobierno será incansable en su tarea de apoyar la labor fundamental que las Naciones Unidas deben desempeñar en el presente y futuro de Irak".
En cuanto al futuro de este país, destacó el apoyo que debe prestarse al Consejo de Gobierno iraquí y apuntó que el establecimiento de un calendario para aprobar una Constitución y celebrar elecciones libres es algo "esencial".