L D (EFE) El documento que analizarán los dirigentes regionales socialistas en Santillana del Mar (Cantabria), publicado este viernes en El País , propone modificar el Senado para convertirlo en cámara de representación de las autonomías, incluir a un representante autonómico en la representación española en la Unión Europea, constituir una conferencia anual de presidente autonómicos e impulsar un nuevo planteamiento de las infraestructuras que favorezca corredores transversales y longitudinales entre regiones, y no de carácter radial desde Madrid. Además, el documento indica que el PSOE apoyará las reformas de estatutos de autonomía que se adapten de forma "impecable" a la Constitución, tengan "un amplio consenso político y social" y sean congruentes con el proyecto socialista, aunque no concreta en qué comunidades autónomas.
Tras conocer los términos de la propuesta socialista, el vicepresidente primero del Gobierno, Mariano Rajoy, dijo que es "frívola", "irresponsable" y "nada conveniente para los intereses generales de España" y ofreció al PSOE recuperar el consenso que ha habido estos años en materia de organización territorial. Rajoy explicó que el Gobierno considera que se trata de una "carrera hacia no se sabe dónde, que supone desequilibrar un acuerdo tan difícil como fue el constitucional" y agregó que el PP "está dispuesto a hablar de todo" pero, matizó, "no es un momento para plantear ni reformas estatutarias ni constitucionales porque no vemos necesidad, ni demanda, ni tiene sentido". "Reunirse a estas alturas de la democracia para fijar el modelo de Estado por parte de un partido que durante 13 años ha sido Gobierno, sinceramente no me parece una cosa seria", apostilló Rajoy.
Por el contrario, el portavoz del PSOE en el Congreso, Jesús Caldera, afirmó que al PP "le preocupa perder el poder y no la idea de España" y calificó al Gobierno de "sectario" por "utilizar el Consejo de Ministros para criticar y atacar a todo aquel que discrepa", en referencia a la conferencia de prensa de Rajoy. "Al PP le preocupa Pasqual Maragall: es una voz inteligente que habla con pasión desde Cataluña para España, pero habla de España, de un proyecto común", destacó Caldera. En el mismo sentido, el portavoz del PSC en el Parlamento catalán, Joaquim Nadal, calificó el proyecto socialista como "sólido" y "bien planteado", y dijo que permitirá "una profundización del concepto de la España plural" que dará cabida al nuevo Estatuto para Cataluña que propugnan los socialistas catalanes.
El secretario general de los socialistas vascos, Patxi López, declaró que la propuesta alternativa al Plan Ibarretxe que elabora el PSE "está ya en el documento", en el que tanto los socialistas vascos como los catalanes, aseguró, se sienten "cómodos". También expresaron su apoyo al documento base para la cumbre autonómica los presidentes de Aragón, Marcelino Iglesias, el ex presidente balear, Francesc Antich, y el secretario general del Partido Socialista Canario, Juan Carlos Alemán, para quien, frente a un PP que se "atrinchera" en un centralismo "más cercano a la preconstitución que a la Constitución" y que provoca desunión, el PSOE apuesta por el respeto a la diversidad como garantía de la unidad del país.
Desde otros partidos, el coordinador general de IU, Gaspar Llamazares, se alegró por este tipo de propuestas porque cree que debe abrirse un debate "normalizado" sin que se "criminalice" a quien discrepa de la opinión del PP. El portavoz de la Chunta Aragonesista en las Cortes de Aragón, Chesús Bernal, manifestó que el documento "más que a planteamientos autonomistas hace referencia a luchas internas de los barones socialistas".
Tras conocer los términos de la propuesta socialista, el vicepresidente primero del Gobierno, Mariano Rajoy, dijo que es "frívola", "irresponsable" y "nada conveniente para los intereses generales de España" y ofreció al PSOE recuperar el consenso que ha habido estos años en materia de organización territorial. Rajoy explicó que el Gobierno considera que se trata de una "carrera hacia no se sabe dónde, que supone desequilibrar un acuerdo tan difícil como fue el constitucional" y agregó que el PP "está dispuesto a hablar de todo" pero, matizó, "no es un momento para plantear ni reformas estatutarias ni constitucionales porque no vemos necesidad, ni demanda, ni tiene sentido". "Reunirse a estas alturas de la democracia para fijar el modelo de Estado por parte de un partido que durante 13 años ha sido Gobierno, sinceramente no me parece una cosa seria", apostilló Rajoy.
Por el contrario, el portavoz del PSOE en el Congreso, Jesús Caldera, afirmó que al PP "le preocupa perder el poder y no la idea de España" y calificó al Gobierno de "sectario" por "utilizar el Consejo de Ministros para criticar y atacar a todo aquel que discrepa", en referencia a la conferencia de prensa de Rajoy. "Al PP le preocupa Pasqual Maragall: es una voz inteligente que habla con pasión desde Cataluña para España, pero habla de España, de un proyecto común", destacó Caldera. En el mismo sentido, el portavoz del PSC en el Parlamento catalán, Joaquim Nadal, calificó el proyecto socialista como "sólido" y "bien planteado", y dijo que permitirá "una profundización del concepto de la España plural" que dará cabida al nuevo Estatuto para Cataluña que propugnan los socialistas catalanes.
El secretario general de los socialistas vascos, Patxi López, declaró que la propuesta alternativa al Plan Ibarretxe que elabora el PSE "está ya en el documento", en el que tanto los socialistas vascos como los catalanes, aseguró, se sienten "cómodos". También expresaron su apoyo al documento base para la cumbre autonómica los presidentes de Aragón, Marcelino Iglesias, el ex presidente balear, Francesc Antich, y el secretario general del Partido Socialista Canario, Juan Carlos Alemán, para quien, frente a un PP que se "atrinchera" en un centralismo "más cercano a la preconstitución que a la Constitución" y que provoca desunión, el PSOE apuesta por el respeto a la diversidad como garantía de la unidad del país.
Desde otros partidos, el coordinador general de IU, Gaspar Llamazares, se alegró por este tipo de propuestas porque cree que debe abrirse un debate "normalizado" sin que se "criminalice" a quien discrepa de la opinión del PP. El portavoz de la Chunta Aragonesista en las Cortes de Aragón, Chesús Bernal, manifestó que el documento "más que a planteamientos autonomistas hace referencia a luchas internas de los barones socialistas".