L D (Agencias) Este viernes, las flores han seguido amontonándose frente a las puertas de los almacenes NK del centro de Estocolmo, donde un desconocido apuñaló a la ministra el pasado miércoles. Los habitantes de la capital sueca intentan volver poco a poco a la normalidad tras la conmoción que provocó la noticia del fallecimiento de Lindh. En Estocolmo, alrededor de 10.000 personas se reunieron por la tarde en la plaza Sergels del centro de la ciudad para escuchar al primer ministro, Goeran Persson, que despidió a su compañera de partido con un emotivo discurso en el que elogió su grandeza política y humana y animó a toda la sociedad a continuar su lucha por los valores propios del sistema democrático.
La normalidad quiere empezar también a volver a la vida política, después de que el asesinato de la ministra ocultara la realidad incuestionable de que sólo faltan dos días para que se celebre un referéndum que determinará si Suecia se incorpora o no al euro. Todas las fuerzas políticas dieron por acabada la campaña tras el asesinato. Los expertos se muestran casi unánimes en opinar que el atentado contra una de las principales figuras del "sí" al euro no tendrá demasiada influencia en el voto de los ciudadanos suecos. No obstante, los primeros sondeos realizados el jueves por la tarde tras conocerse la noticia del fallecimiento de Anna Lindh son contradictorios y presentan un panorama incierto.
Por primera vez desde hace varios meses, un sondeo encargado por el diario "Aftonbladet" coloca la intención de voto del "sí" empatada con el "no" después de registrarse un importantísimo avance de los partidarios del euro tras el fallecimiento de la ministra. Sin embargo, a media mañana otro sondeo, realizado también tras la noticia de la muerte y encargado por la agencia de noticias sueca, mostró no sólo que la diferencia del "no" se mantiene, sino que incluso aumentó hasta los 12 puntos.
La normalidad quiere empezar también a volver a la vida política, después de que el asesinato de la ministra ocultara la realidad incuestionable de que sólo faltan dos días para que se celebre un referéndum que determinará si Suecia se incorpora o no al euro. Todas las fuerzas políticas dieron por acabada la campaña tras el asesinato. Los expertos se muestran casi unánimes en opinar que el atentado contra una de las principales figuras del "sí" al euro no tendrá demasiada influencia en el voto de los ciudadanos suecos. No obstante, los primeros sondeos realizados el jueves por la tarde tras conocerse la noticia del fallecimiento de Anna Lindh son contradictorios y presentan un panorama incierto.
Por primera vez desde hace varios meses, un sondeo encargado por el diario "Aftonbladet" coloca la intención de voto del "sí" empatada con el "no" después de registrarse un importantísimo avance de los partidarios del euro tras el fallecimiento de la ministra. Sin embargo, a media mañana otro sondeo, realizado también tras la noticia de la muerte y encargado por la agencia de noticias sueca, mostró no sólo que la diferencia del "no" se mantiene, sino que incluso aumentó hasta los 12 puntos.