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SI ESTUVIERA EN LA LEGISLACIÓN ESPAÑOLA

La madre de Sonia Carabantes pediría la pena de muerte para el asesino de su hija

Encarnación Guzmán, la madre de Sonia Carabantes, la joven de Coín (Málaga) que apareció muerta el pasado 19 de agosto, ha afirmado que pediría la pena de muerte para el asesino confeso de su hija, Tony King, si la pena capital estuviera prevista por la legislación española. Según la madre de Sonia: "King tiene que estar en la cárcel de por vida, sin ver a su hija, como yo no veo a la mía".

LD (EFE) Así lo manifestó durante una entrevista con Efe Televisión, en la que se mostró convencida de que "a gente así, que sabe lo que ha hecho" se le debería aplicar la pena de muerte, "pero como aquí no existe, que se quede allí dentro -en la cárcel- y que no salga". Según la madre de Sonia, King "no es ningún enfermo y mata porque le gusta matar". Además, Encarnación Guzmán cree que no tiene sentido el testimonio del británico en el que asegura que atropelló a Sonia involuntariamente, ya que de ser así "no se la hubiera llevado después en el coche".

En referencia a las misivas que King escribió desde la cárcel y que estaban dirigidas a las familias de Sonia y de Rocío Wanninkhof tras confesarse el autor de la muerte de estas jóvenes, Guzmán asegura que no le interesa "ninguna carta de esa persona". "La he visto en la prensa y lo único que me importa es que se trata de un criminal y tiene que estar en la cárcel de por vida sin ver a su hija, igual que yo no veo a la mía , y que también sienta que lo ha perdido todo, como lo he perdido yo".

La madre de Sonia no tiene intención de perdonar "jamás a esa persona, porque no tiene perdón, ya que a mi hija no la voy a ver más y siento un rencor grandísimo por este hombre porque me ha quitado a mi niña de 17 años". Con respecto a la puesta en libertad de Robie Graham, el presunto encubridor de King, basada en la prescripción de su delito, Guzmán aseguró que "me pareció fatal, porque esa persona es tan culpable como la otra, ya que se ha callado lo que sabía" para que siguiera cometiendo delitos.

El hecho de que el Ministerio de Interior hubiera recibido informes de Interpol sobre los antecedentes delictivos del británico "y supieran que había un delincuente aquí, me pareció demasiado", porque los asesinatos de su hija y de Rocío Wanninkhof, "se podrían haber evitado". Cuando se trata "de un etarra miran rápidamente y lo sacan, y cuando se trata de un criminal así ¿No lo sacan?", se preguntó la madre de la joven, quien pidió que las instituciones dejen de echarse la pelota unos a otros y que sean responsables para dar la cara.

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