L D (EFE) Raikkonen fue el mejor en la clasificación definitiva de este sábado al cubrir en su vuelta rápida los 4.192 metros del mítico circuito de Indianápolis en un tiempo de un minuto, once segundos y 670 milésimas, 124 menos que el brasileño Rubens Barrichello, que le acompañará desde la primera fila de la parrilla. El finlandés, tercero en el Mundial, a siete puntos del alemán Michael Schumacher (Ferrari) -que lidera con 82- y a cuatro del colombiano Juan Pablo Montoya (Williams-BMW), firmó la segunda "pole" de su carrera -después de la que logró este año en el Nuerburgring alemán- y se metió de nuevo en la lucha por un Mundial en el que todavía tendrá mucho que decir si este domingo logra mantener la posición lograda.
Montoya saldrá desde la segunda fila -fue cuarto, por detrás del francés Olivier Panis (Toyota)- y tendrá la oportunidad de relegar el desenlace del Mundial hasta la prueba de Suzuka, en Japón, dentro de dos semanas, ya que Schumacher, que busca un sexto titulo mundial sin precedentes, sólo pudo ser séptimo y saldrá desde la cuarta hilera. Schumi tuvo dos pequeños fallos en las dos primeras curvas que le pueden complicar las cosas en su afán de romper a su favor el empate que le une al argentino Juan Manuel Fangio, que también ganó cinco títulos, en la década de los cincuenta. Pero nunca hay que tachar al alemán de ninguna lista y, de momento, de los tres contendientes, es el único que podría proclamarse campeón del mundo en Indianápolis.
Para ello debería ganar la carrera y que Montoya quede sexto o por debajo, siempre y cuando Raikkonen no sea segundo; o bien ser segundo y que el colombiano no supere el octavo puesto, en una prueba que tuviese cualquier ganador menos el finlandés, que tampoco podría ser tercero. No le resultará fácil, porque tendrá por delante a sus rivales directos y a Alonso, que también puede soñar con un nuevo podio, ya que arrancará desde la tercera fila. El asturiano tuvo algunos problemas con su coche en los entrenamientos libres matinales, en los que fue quinto y décimo, que no le impidieron marcar el sexto mejor crono en la clasificación.
Alonso -ganador este año en Hungría, segundo en Barcelona y tercero en Malasia y en Brasil-, que ocupa el quinto lugar en el Mundial -con 55 puntos-, giró en 1:12.087 y arrancará junto a Ralf Schumacher (Williams-BMW), cuyo comportamiento en carrera podría ser igual de decisivo que el de Barrichello en la pugna que mantendrán el "gran hermano" y el piloto de Bogotá. Pero lo que está claro es que Raikkonen se puede meter de lleno en la lucha si gana este domingo y los dos primeros clasificados del Mundial no suben al podio. En ese caso el desenlace se trasladará a tierras niponas.
El italiano Jarno Trulli, compañero de Alonso en Renault, que durante todas las sesiones -privadas y libres- disputadas el fin de semana había marcado el mejor tiempo, a excepción del segundo ensayo de este sábado, en el que fue el segundo, tuvo un accidente en el calentamiento. Se salió de pista y sus mecánicos tuvieron que ponerle el coche a punto a toda prisa antes de la clasificación. Al final, sólo pudo marcar el décimo mejor tiempo, con lo que en el balance interno, Alonso le acortó distancias y ahora el italiano sólo gana por 8-7 en los resultados de las clasificaciones. Otra cosa es el Mundial, donde el genial piloto del Principado supera el doble de los puntos que ha logrado Trulli. Ahí no hay color.
Montoya saldrá desde la segunda fila -fue cuarto, por detrás del francés Olivier Panis (Toyota)- y tendrá la oportunidad de relegar el desenlace del Mundial hasta la prueba de Suzuka, en Japón, dentro de dos semanas, ya que Schumacher, que busca un sexto titulo mundial sin precedentes, sólo pudo ser séptimo y saldrá desde la cuarta hilera. Schumi tuvo dos pequeños fallos en las dos primeras curvas que le pueden complicar las cosas en su afán de romper a su favor el empate que le une al argentino Juan Manuel Fangio, que también ganó cinco títulos, en la década de los cincuenta. Pero nunca hay que tachar al alemán de ninguna lista y, de momento, de los tres contendientes, es el único que podría proclamarse campeón del mundo en Indianápolis.
Para ello debería ganar la carrera y que Montoya quede sexto o por debajo, siempre y cuando Raikkonen no sea segundo; o bien ser segundo y que el colombiano no supere el octavo puesto, en una prueba que tuviese cualquier ganador menos el finlandés, que tampoco podría ser tercero. No le resultará fácil, porque tendrá por delante a sus rivales directos y a Alonso, que también puede soñar con un nuevo podio, ya que arrancará desde la tercera fila. El asturiano tuvo algunos problemas con su coche en los entrenamientos libres matinales, en los que fue quinto y décimo, que no le impidieron marcar el sexto mejor crono en la clasificación.
Alonso -ganador este año en Hungría, segundo en Barcelona y tercero en Malasia y en Brasil-, que ocupa el quinto lugar en el Mundial -con 55 puntos-, giró en 1:12.087 y arrancará junto a Ralf Schumacher (Williams-BMW), cuyo comportamiento en carrera podría ser igual de decisivo que el de Barrichello en la pugna que mantendrán el "gran hermano" y el piloto de Bogotá. Pero lo que está claro es que Raikkonen se puede meter de lleno en la lucha si gana este domingo y los dos primeros clasificados del Mundial no suben al podio. En ese caso el desenlace se trasladará a tierras niponas.
El italiano Jarno Trulli, compañero de Alonso en Renault, que durante todas las sesiones -privadas y libres- disputadas el fin de semana había marcado el mejor tiempo, a excepción del segundo ensayo de este sábado, en el que fue el segundo, tuvo un accidente en el calentamiento. Se salió de pista y sus mecánicos tuvieron que ponerle el coche a punto a toda prisa antes de la clasificación. Al final, sólo pudo marcar el décimo mejor tiempo, con lo que en el balance interno, Alonso le acortó distancias y ahora el italiano sólo gana por 8-7 en los resultados de las clasificaciones. Otra cosa es el Mundial, donde el genial piloto del Principado supera el doble de los puntos que ha logrado Trulli. Ahí no hay color.