L D (EFE) El presidente de Castilla-La Mancha, José Bono, hizo entrega este viernes de la bandera de España a la segunda zona de la Guardia Civil, correspondiente a la comunidad autónoma que gobierna. En este acto quiso dirigirse a los miembros de la Benemérita, de la que destacó su respeto a la Ley y al orden constitucional, con estas palabras: "Os toca defender la Constitución de aquellos que quieren cuartearla y que se amparan en ese instrumento que quieren cuartear".
Bono advirtió de que "con España no se puede jugar" y señaló que "hay que poner fin a la hemorragia contaminante de aquellos que quieren cuartear la Constitución" y que, sin embargo, están en el lugar que están porque existe la Carta Magna. Además dijo que "el terror, la tibieza y la ambigüedad han corrompido las palabras", como la palabra "autodeterminación", por lo que agradeció a los obispos españoles que "hayan dicho que la autodeterminación es inmoral".
Consideró que "los españoles no han agradecido bastante" la existencia del cuerpo de la Guardia Civil y añadió, en este sentido, que "si no hubiera Guardia Civil, habría que inventarla", pues, en su opinión, "es difícil encontrar en un país democrático un cuerpo con tanta vocación y respeto a la Ley y a la Constitución".
Una "injusticia insoportable"
Bono dijo que, aunque la Guardia Civil podría prescindir de un acto como el que se ha celebrado este viernes en la plaza del Ayuntamiento de Toledo, "sin la liturgia del acto no existiría probablemente el sentimiento que queremos trasladar a nuestros hijos" y añadió que "España no es una madrastra de nadie, es madre, y de ella nos sentimos orgullosos, no sólo por su pasado, sino por su futuro".
Por otro lado, explicó que a la hora de elegir a la madrina del acto, que ha sido María del Prado de Jesús Encinas, hermana del guardia civil José Ángel de Jesús Encinas, asesinado el 20 de agosto de 2000 en Sallent de Gállego (Huesca), último miembro castellano-manchego del cuerpo asesinado por ETA, "tuvimos dudas entre ella y la delegada del Gobierno" en Castilla-La Mancha, Encarnación Naharro. Recordó que el padre de Naharro, que también asistió a este acto en que se rindió un homenaje a los guardias civiles muertos en cumplimiento del deber, murió este año en "dramáticas circunstancias y amando a la Guardia Civil" en la Comandancia de Albacete, junto al comandante Isidoro Turrión.
No obstante, señaló que "sentir de cerca a los muertos no nos puede hacer olvidar las dificultades de los vivos" y calificó de "injusticia insoportable" que un mosso de esquadra o un ertzaina "gane más que un guardia civil".
Por su parte, el general-jefe de la II Zona de la Guardia Civil, Juan Carlos Rodríguez Búrdalo, expresó su gratitud por la bandera entregada por el Gobierno de Castilla-La Mancha para ser utilizada en los actos oficiales de esta Zona de la Benemérita, que "nos acompañará siempre arropando nuestros actos, pero que también nos demandará trabajo y eficacia". Rodríguez Búrdalo tuvo un recuerdo para José Antonio Bernal, agregado de la embajada de España en Bagdad asesinado ayer en esta ciudad, y para José Ángel de Jesús Encinas, a quien dijo "arrebataron la vida los que sólo entienden el rito de los dioses pequeños y el hedor de su cruel liturgia". La hermana de este guardia civil, María del Prado de Jesús Encinas, agradeció el honor de amadrinar la entrega de esta bandera y al Gobierno de Castilla-La Mancha esta iniciativa que "ensalza a nuestra nación y a nuestra bandera y que reconoce las virtudes y los méritos de la Guardia Civil".
Bono advirtió de que "con España no se puede jugar" y señaló que "hay que poner fin a la hemorragia contaminante de aquellos que quieren cuartear la Constitución" y que, sin embargo, están en el lugar que están porque existe la Carta Magna. Además dijo que "el terror, la tibieza y la ambigüedad han corrompido las palabras", como la palabra "autodeterminación", por lo que agradeció a los obispos españoles que "hayan dicho que la autodeterminación es inmoral".
Consideró que "los españoles no han agradecido bastante" la existencia del cuerpo de la Guardia Civil y añadió, en este sentido, que "si no hubiera Guardia Civil, habría que inventarla", pues, en su opinión, "es difícil encontrar en un país democrático un cuerpo con tanta vocación y respeto a la Ley y a la Constitución".
Una "injusticia insoportable"
Bono dijo que, aunque la Guardia Civil podría prescindir de un acto como el que se ha celebrado este viernes en la plaza del Ayuntamiento de Toledo, "sin la liturgia del acto no existiría probablemente el sentimiento que queremos trasladar a nuestros hijos" y añadió que "España no es una madrastra de nadie, es madre, y de ella nos sentimos orgullosos, no sólo por su pasado, sino por su futuro".
Por otro lado, explicó que a la hora de elegir a la madrina del acto, que ha sido María del Prado de Jesús Encinas, hermana del guardia civil José Ángel de Jesús Encinas, asesinado el 20 de agosto de 2000 en Sallent de Gállego (Huesca), último miembro castellano-manchego del cuerpo asesinado por ETA, "tuvimos dudas entre ella y la delegada del Gobierno" en Castilla-La Mancha, Encarnación Naharro. Recordó que el padre de Naharro, que también asistió a este acto en que se rindió un homenaje a los guardias civiles muertos en cumplimiento del deber, murió este año en "dramáticas circunstancias y amando a la Guardia Civil" en la Comandancia de Albacete, junto al comandante Isidoro Turrión.
No obstante, señaló que "sentir de cerca a los muertos no nos puede hacer olvidar las dificultades de los vivos" y calificó de "injusticia insoportable" que un mosso de esquadra o un ertzaina "gane más que un guardia civil".
Por su parte, el general-jefe de la II Zona de la Guardia Civil, Juan Carlos Rodríguez Búrdalo, expresó su gratitud por la bandera entregada por el Gobierno de Castilla-La Mancha para ser utilizada en los actos oficiales de esta Zona de la Benemérita, que "nos acompañará siempre arropando nuestros actos, pero que también nos demandará trabajo y eficacia". Rodríguez Búrdalo tuvo un recuerdo para José Antonio Bernal, agregado de la embajada de España en Bagdad asesinado ayer en esta ciudad, y para José Ángel de Jesús Encinas, a quien dijo "arrebataron la vida los que sólo entienden el rito de los dioses pequeños y el hedor de su cruel liturgia". La hermana de este guardia civil, María del Prado de Jesús Encinas, agradeció el honor de amadrinar la entrega de esta bandera y al Gobierno de Castilla-La Mancha esta iniciativa que "ensalza a nuestra nación y a nuestra bandera y que reconoce las virtudes y los méritos de la Guardia Civil".