(Libertad Digital) El mes pasado, cuando se supo que Tony Alexander King, el asesino de la Costa del Sol, tenía un largo historial delictivo en el Reino Unido, las críticas a Interior y a la Policía por desconocer que vivía en Málaga fueron muy contundentes.
El ministro del Interior, Ángel Acebes, reiteró que la Policía no podía guardar los datos que, tiempo atrás, le había transmitido Scotland Yard con los datos de King. Cuando la Policía británica informó a la española de King, sólo quería constatar que seguía en España, sin más. Aunque en aquella nota, transmitida por Interpol, se indicaba que King era potencialmente peligroso, sus datos no podían quedar archivados en una base de datos, simplemente porque la ley lo impide, según explicó Acebes.
Sin embargo, tras suscitarse la controversia y el debate, Acebes aprovechó para proponer la idea de crear una base de datos de personas potencialmente peligrosas. "Es bueno, positivo e importante para nuestra seguridad", dijo Acebes recientemente, elaborar esas bases de datos, aunque "habría que hacer una reflexión jurídica profunda para que no pusiésemos en riesgo ningún derecho y mucho menos alguno de los derechos fundamentales y constitucionales".
La propuesta del ministro del Interior quedó sobre la mesa, y Acebes propuso al PSOE y al resto de fuerzas de la oposición al menos una reflexión al respecto. "Es de una lógica y de un sentido común que, con aquellos que hayan tenido unos antecedentes por los delitos más graves, y que han sido condenados por los delitos más peligrosos como son los que tienen relación con los abusos sexuales, haya una base policial", argumentó recientemente el ministro del Interior.
En ese fichero de personas sospechosas, "los antecedentes quedarían de manera más o menos estable, para que cuando se produzca la investigación de determinados delitos, poder echar mano a esas bases automatizadas de datos y conocer y facilitar la investigación de esos delincuentes que tienen un perfil más peligroso y que han sido condenados por ello", explicó Acebes, para reiterar a continuación que "merece una reflexión muy importante que, con limitaciones y con garantías, la Policía y la Guardia Civil en sus investigaciones puedan contar con esos datos".
El ministro del Interior, Ángel Acebes, reiteró que la Policía no podía guardar los datos que, tiempo atrás, le había transmitido Scotland Yard con los datos de King. Cuando la Policía británica informó a la española de King, sólo quería constatar que seguía en España, sin más. Aunque en aquella nota, transmitida por Interpol, se indicaba que King era potencialmente peligroso, sus datos no podían quedar archivados en una base de datos, simplemente porque la ley lo impide, según explicó Acebes.
Sin embargo, tras suscitarse la controversia y el debate, Acebes aprovechó para proponer la idea de crear una base de datos de personas potencialmente peligrosas. "Es bueno, positivo e importante para nuestra seguridad", dijo Acebes recientemente, elaborar esas bases de datos, aunque "habría que hacer una reflexión jurídica profunda para que no pusiésemos en riesgo ningún derecho y mucho menos alguno de los derechos fundamentales y constitucionales".
La propuesta del ministro del Interior quedó sobre la mesa, y Acebes propuso al PSOE y al resto de fuerzas de la oposición al menos una reflexión al respecto. "Es de una lógica y de un sentido común que, con aquellos que hayan tenido unos antecedentes por los delitos más graves, y que han sido condenados por los delitos más peligrosos como son los que tienen relación con los abusos sexuales, haya una base policial", argumentó recientemente el ministro del Interior.
En ese fichero de personas sospechosas, "los antecedentes quedarían de manera más o menos estable, para que cuando se produzca la investigación de determinados delitos, poder echar mano a esas bases automatizadas de datos y conocer y facilitar la investigación de esos delincuentes que tienen un perfil más peligroso y que han sido condenados por ello", explicó Acebes, para reiterar a continuación que "merece una reflexión muy importante que, con limitaciones y con garantías, la Policía y la Guardia Civil en sus investigaciones puedan contar con esos datos".