L D (EFE) La mayor parte de los fondos comprometidos para la conferencia, que se celebrará el jueves y el viernes en Madrid, corresponde a los 20.300 millones asignados a este fin por EEUU, de los cuales la mitad podrían ser entregados en forma de préstamo si finalmente se impone la opinión del Senado estadounidense.
Japón contribuirá con 1.500 millones a cubrir durante el próximo año las necesidades más urgentes de la reconstrucción, pero trabaja además en la preparación de un conjunto adicional de ayudas para el periodo 2004-2007 que puede ascender a 5.000 millones. Por su parte, el Reino Unido será el tercer país contribuyente, con 912 millones de dólares, y España el cuarto, al haber decidido aportar 300 millones al Fondo de Reconstrucción y Desarrollo para Irak, que se constituirá en la propia Conferencia y estará gestionado por el Banco Mundial y la ONU.
En cuanto a los organismos multilaterales, el Banco Mundial contribuirá con una cifra entre 3.000 y 5.000 millones y el Fondo Monetario Internacional (FMI) con unos 400 millones, en tanto que la Comisión Europea aportará 232 millones de dólares del presupuesto común de la UE hasta finales del 2004. El secretario general de la ONU, Kofi Annan, quien ha llegado a la capital española la madrugada de este miércoles, abrirá la Conferencia el próximo jueves, en la que también participarán, en una reunión paralela, unas 225 empresas de todo el mundo con intención de participar en la reconstrucción iraquí.
Según el secretario de Estado de Defensa y comisionado del Gobierno español para la Reconstrucción de Irak, Fernando Díez Moreno, la conferencia pretende "conocer la situación actual de Irak, establecer las prioridades de su reconstrucción, en un proceso a largo plazo, que puede durar diez años o más, conocer las aportaciones de los países y constituir un fondo multilateral" que, según Díez Moreno, tendrá "dos ventanillas: una gestionada por la ONU para prioridades sociales y humanitarias, y otra del Banco Mundial, para la reconstrucción material". El comisionado precisó que este fondo no debe confundirse con el establecido en la resolución 1.483, que "se nutre de fondos de la venta de petróleo" y de las incautaciones al régimen iraquí, que gestiona el Banco Central Iraquí.
Japón contribuirá con 1.500 millones a cubrir durante el próximo año las necesidades más urgentes de la reconstrucción, pero trabaja además en la preparación de un conjunto adicional de ayudas para el periodo 2004-2007 que puede ascender a 5.000 millones. Por su parte, el Reino Unido será el tercer país contribuyente, con 912 millones de dólares, y España el cuarto, al haber decidido aportar 300 millones al Fondo de Reconstrucción y Desarrollo para Irak, que se constituirá en la propia Conferencia y estará gestionado por el Banco Mundial y la ONU.
En cuanto a los organismos multilaterales, el Banco Mundial contribuirá con una cifra entre 3.000 y 5.000 millones y el Fondo Monetario Internacional (FMI) con unos 400 millones, en tanto que la Comisión Europea aportará 232 millones de dólares del presupuesto común de la UE hasta finales del 2004. El secretario general de la ONU, Kofi Annan, quien ha llegado a la capital española la madrugada de este miércoles, abrirá la Conferencia el próximo jueves, en la que también participarán, en una reunión paralela, unas 225 empresas de todo el mundo con intención de participar en la reconstrucción iraquí.
Según el secretario de Estado de Defensa y comisionado del Gobierno español para la Reconstrucción de Irak, Fernando Díez Moreno, la conferencia pretende "conocer la situación actual de Irak, establecer las prioridades de su reconstrucción, en un proceso a largo plazo, que puede durar diez años o más, conocer las aportaciones de los países y constituir un fondo multilateral" que, según Díez Moreno, tendrá "dos ventanillas: una gestionada por la ONU para prioridades sociales y humanitarias, y otra del Banco Mundial, para la reconstrucción material". El comisionado precisó que este fondo no debe confundirse con el establecido en la resolución 1.483, que "se nutre de fondos de la venta de petróleo" y de las incautaciones al régimen iraquí, que gestiona el Banco Central Iraquí.