(Libertad Digital) El expediente de la Delegación del Gobierno en Madrid, al que tuvo acceso Libertad Digital, rechaza la exención de visado a un alto funcionario cubano huido de su país.
En su solicitud, el ex alto cargo del régimen castrista pedía a las autoridades españolas que no le obligaran a volver a la Isla para obtener un visado de ingreso a España porque, si regresa, peligra su vida.
El huido se acogió al artículo 49.2.b del Real Decreto 864/2001, que desarrolla la Ley de Extranjería. El artículo dice que estarán exentos de visado y, por tanto, podrán solicitar automáticamente un permiso de residencia y trabajo en España, aquellos "extranjeros que no pueden conseguir el visado por implicar un peligro para su seguridad o la de su familia su traslado al país del que son originarios o proceden, o por carecer de vínculos personales con dicho país".
Miembro de la "Nomenclatura" del régimen
En este caso, el ex funcionario cubano entregó a la Delegación del Gobierno en Madrid algunos documentos oficiales que le acreditan como uno de los miembros de la "Nomenclatura de la Comisión Central de Cuadros" de Cuba. Uno de los documentos, a los que tuvo acceso Libertad Digital, es el certificado de su nombramiento para un puesto muy destacado del régimen, dictado por el Comité Ejecutivo del Consejo de Ministros de Fidel Castro, que lleva la firma del propio vicepresidente cubano, Carlos Lage Dávila.
El ex alto cargo huido argumentaba ante las autoridades españolas que, debido a su alta posición en el régimen castrista, si regresa a Cuba no volvería a salir de allí. Además, recordaba a la Delegación del Gobierno en Madrid que, cuando un cubano sale de la Isla y no regresa en un año, ya es imposible que pueda volver a su país, porque pierde todos sus derechos como ciudadano. Así lo marca la legislación cubana y, según fuentes del exilio consultadas por Libertad Digital, las autoridades españolas "conocen perfectamente esta cuestión".
Se le concedió el visado, pero "duerme el sueño de los justos"
Según relataron fuentes cercanas al ex funcionario, él y su mujer llegaron a España con un visado de turista, pero decididos a quedarse. En su caso, la visa expiraba en un mes. En apenas unos días, el ex alto cargo cubano consiguió una oferta de empleo y solicitó un visado para quedarse a trabajar. Las autoridades tramitaron su solicitud y enviaron su visado a la Embajada de España en Cuba, en lugar de entregárselo a él personalmente. Así ocurre prácticamente con todos los extranjeros que consiguen un empleo: que deben regresar a sus países de origen, recoger el visado y volver a España.
El documento, que según las mismas fuentes "seguramente está durmiendo el sueño de los justos" en la Embajada o en algún consulado español en Cuba y, además, "ya estará caducado", no puede ser recogido por el ex funcionario porque, si regresa a su país, "corre el peligro de ser detenido", afirmaron. Además, él y su esposa ya llevan en España más de un año, por lo que han perdido todos sus derechos como ciudadanos cubanos y actualmente "podríamos decir que son unos apátridas", según las mismas fuentes consultadas por Libertad Digital.
Ansuátegui lo sabe, pero se limita a aplicar la ley
Así pues, la resolución dictada por la Delegación de Gobierno en Madrid le cierra las puertas para poder trabajar en España, a pesar de tener una oferta de empleo. No obstante, la resolución aún le permite recurrir ante la propia Delegación de Gobierno o a través de un recurso contencioso-administrativo. Sin embargo, su visado caducó hace meses y la propia resolución le indica que, "si se hubiesen superado los plazos legales de estancia, deberá abandonar el territorio español en el plazo máximo de 15 días". Según fuentes cercanas al caso, el ex funcionario teme ahora ser devuelto a su país, donde ni siquiera sería admitido o, aún peor, sería encarcelado.
Fuentes de la Delegación del Gobierno en Madrid afirmaron que el delegado, Francisco Javier Ansuátegui, "conoce" estos casos y "lamenta" la dramática situación personal que sufren los cubanos que intentan refugiarse en España. Sin embargo, las mismas fuentes explicaron a Libertad Digital que "el problema" está en la Ley de Extranjería, que no contempla este supuesto, y que en la Delegación se limitan "a aplicar la ley", porque "no podemos hacer excepciones", aunque admiten que existe un "limbo jurídico".
Fuentes del exilio cubano confirmaron que actualmente hay 3.000 cubanos en España cuya situación es similar: "Ni tienen papeles, ni pueden regresar, ni maldita la gracia que les hace pensar siquiera en volver a la finca de los hermanos Castro", dijeron.