LD (EFE) Estas son las conclusiones extraídas por la mayoría de los observadores ante las recientes señales dadas por el presidente de la entidad, Jean-Claude Trichet, ante el Parlamento Europeo y en otras intervenciones públicas realizadas durante esta semana.
Los economistas que siguen al BCE no creen que toque el precio del dinero, que desde junio está en el 2 por ciento, hasta bien entrado 2004, como muy pronto en abril, e incluso posiblemente más tarde, siempre que los precios no se disparen.
El índice interanual de inflación en noviembre subió dos décimas, hasta el 2,2 por ciento, 2 décimas por encima del ideal fijado por el instituto europeo, aunque, según los analistas, en 2004 puede volver a caer a niveles próximos al 1,8 por ciento.
También hay otros peligros que acechan a la Unión Monetaria de los Doce y al BCE, que forja su política monetaria, pero son de carácter institucional. El peligro principal es una propuesta hecha por la Comisión Europea que cambiaría la futura composición del Consejo de Gobierno de la entidad y recortaría su independencia.
Los economistas que siguen al BCE no creen que toque el precio del dinero, que desde junio está en el 2 por ciento, hasta bien entrado 2004, como muy pronto en abril, e incluso posiblemente más tarde, siempre que los precios no se disparen.
El índice interanual de inflación en noviembre subió dos décimas, hasta el 2,2 por ciento, 2 décimas por encima del ideal fijado por el instituto europeo, aunque, según los analistas, en 2004 puede volver a caer a niveles próximos al 1,8 por ciento.
También hay otros peligros que acechan a la Unión Monetaria de los Doce y al BCE, que forja su política monetaria, pero son de carácter institucional. El peligro principal es una propuesta hecha por la Comisión Europea que cambiaría la futura composición del Consejo de Gobierno de la entidad y recortaría su independencia.