L D (EFE) A pesar de la tranquilidad con la que transcurrió la noche, los servicios de emergencia de la Comunidad de Madrid recibieron un total de 4.500 avisos, superando a la pasada Nochevieja en la que se produjeron 3.076 llamadas.
La mayor parte de estos avisos se debieron a incendios en contenedores, rescate de atrapados en ascensores, incendios por motivos típicamente navideños en los hogares –cocinas, petardos, velas que quedan sin apagar, etc.– y actuaciones en accidentes de tráfico, más escasos que otras veces y de menor gravedad. También se produjeron otras intervenciones por intoxicaciones etílicas, lesiones en caídas y aglomeraciones y peleas.
Un petardo mató a un joven en Getafe
El incidente más grave durante la Nochevieja ocurrió en la localidad madrileña de Getafe, cuando falleció un joven de 19 años al explotarle en la cara un petardo posiblemente manipulado. El suceso tuvo lugar en torno a la una de la tarde del 31 de diciembre en la calle de Guadarrama del barrio de Perales del Río de Getafe. La Policía investiga en algunas tiendas de "todo a cien" del cercano polígono industrial de "Cobo Calleja", en Fuenlabrada, y en otras zonas cercanas en busca del origen del petardo o el material pirotécnico con el que perdió la vida este chico.
Asimismo, será la policía científica la que en los próximos días determine si el petardo era de fabricación casera, como sospecha la Policía Local de Getafe, o fue adquirido en la forma en que finalmente causó la muerte del joven. Este, al parecer, y según fuentes de la policía local, se encontraba en compañía de otros amigos cuando tuvo lugar la explosión, que le provocó quemaduras en cara y manos de segundo y tercer grado, una hemorragia importante e incluso pérdida de masa encefálica, según Emergencias 112.
Otro petardo destroza una casa en el Puente de Vallecas
Otro artefacto pirotécnico provocó, minutos después de las campanadas de Nochevieja, una gran explosión en una vivienda del distrito madrileño de Puente de Vallecas, como consecuencia de la cual un menor sufrió heridas al parecer leves y su madre fue atendida de una crisis de ansiedad. Según fuentes de Emergencias Madrid, el aviso de la explosión se recibió ocho minutos después de medianoche, y se desplazaron la vivienda, situada en la avenida de Rafael Alberti, numerosos especialistas de SAMUR-Protección Civil y Bomberos del Ayuntamiento de la capital.
Los sanitarios atendieron a una mujer de unos 40 años que se hallaba tendida en la cocina presa de una crisis de ansiedad, y comprobaron que el marido de esta se había llevado en el vehículo familiar a un menor, hijo de ambos, al parecer con heridas leves por cortes, a un centro hospitalario. Los bomberos inspeccionaron la vivienda y comprobaron que la explosión había roto los cristales de gran parte de la vivienda y arrancado los marcos de las ventanas en el salón y la cocina, así como tres metros cuadrados de falso techo.
Al parecer, y según los bomberos, el petardo era de una enorme potencia, y la familia tenía más artefactos de este y de otros tipos en una caja, que afortunadamente no llegaron a estallar.