L D (Agencias) Según publica el último número de la revista "The Economist", la vivienda se encareció en España un 15,7 por ciento entre el tercer trimestre de 2002 y el tercer trimestre de 2003, 1,7 por ciento menos que en los doce meses anteriores. Además, el responsable de banca minorista de España y Portugal del BBVA, Julio López, ha augurado en rueda de prensa que este año los precios de la vivienda no subirán más allá del 10 por ciento.
Según López, en 2004 se cerrarán 975.000 operaciones inmobiliarias, cifra inferior a los 1,1 millones de 2003, aunque este descenso no se reflejará prácticamente en la evolución del sector hipotecario, ya que durante este año se entregarán la mayoría de las viviendas nuevas que las familias compraron en 2002 y 2003, lo que provocará un aumento de la demanda de hipotecas.
Por ello, el negocio hipotecario crecerá este año un 15 por ciento, frente al 13,2 por ciento de 2003. "El mercado no se puede enfriar en seis meses", dijo el directivo del BBVA, quien añadió que ni siquiera una subida de un punto en los tipos de interés -actualmente en el 2 por ciento- afectaría de forma significativa al mercado, pues supondría un incremento de sólo 50 euros en la cuota mensual de una hipoteca media.
López eludió pronunciarse sobre la evolución que tendrán los tipos de interés en Europa durante este ejercicio, porque -explicó- la fortaleza del euro frente al dólar podría inducir al BCE incluso a decidir una bajada, frente a la subida esperada ante la recuperación económica. El director general del BBVA explicó que las familias españolas dedican actualmente el 27,5 por ciento de sus ingresos brutos a pagar la cuota de la hipoteca, cifra que no variará ostensiblemente -pronosticó- si los tipos varían, tanto al alza como a la baja.
Julio López expuso estas previsiones en la presentación de la nueva hipoteca de la entidad, con la que espera captar 3.000 millones de euros en cuatro meses y cerrar 30.000 operaciones. Este producto permite abonar el 20 por ciento de la cuantía de la hipoteca en el momento del vencimiento, cuando la entidad considera que la capacidad financiera de la familia es mayor. De esta forma, se puede reducir la cuantía de la factura mensual del préstamo o bien incrementar la financiación recibida. La hipoteca permite, además, decidir cada año si se desea un tipo de interés fijo o variable y aplica bonificaciones en el precio a los clientes con mayor vinculación con la entidad.