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Berlusconi se volverá a enfrentar a la Justicia tras ser invalidada la ley de inmunidad

El Tribunal Constitucional italiano ha declarado anticonstitucional la ley que otorga inmunidad penal al primer ministro, Silvio Berlusconi. Esta norma, que también debería aplicarse durante a los otros cuatro altos cargos del Estado –Presidente de la República, de la Cámara, del Senado y del Constitucional–, fue aprobada en junio del año pasado, en medio de las protestas de la oposición que la considera hecha a la medida de los intereses de Berlusconi.

L D (EFE) Tras la aprobación de esta ley, en vísperas de que Italia asumiera la presidencia de turno de la UE, los procesos que se le siguen al primer ministro por corrupción quedaron paralizados.
 
El Tribunal ha declarado la ilegalidad de esa norma porque "vulnera los artículos 3 (principio de igualdad) y 24 (derecho a la defensa) de la Constitución".
 
La normativa para reintroducir la inmunidad para algunos altos cargos, aprobada en junio, fue recurrida a finales de ese mes por los fiscales de Milán que acusan de corrupción a Silvio Berlusconi en relación con el caso SME, sobre la venta a privados de lo que era una empresa pública de alimentación. El caso SME se remonta a los años 80, cuando el hoy primer ministro era simplemente empresario, y se sustancia en el pago de dinero a jueces para favorecer una sentencia concreta.
 
La consecuencia legal de la decisión adoptada este martes por el Constitucional es que podrá reanudarse el proceso contra el primer ministro italiano, después de que ya hayan sido juzgados los otros imputados de manera separada. El pasado 22 de noviembre, el parlamentario de Forza Italia y ex ministro de Defensa Cesare Previti, colaborador durante años de Berlusconi, fue condenado a cinco años de cárcel por corrupción, mientras un juez y un abogado imputados en el mismo caso SME lo fueron a ocho y cuatro años de prisión.
 
Los correligionarios de Berlusconi celebraron como un triunfo que Previti no fuera condenado por todas las acusaciones de corrupción concretas, sino únicamente por la llamada "corrupción simple", al considerar probado que de una cuenta del ex ministro en Fininvest salió dinero que acabó en manos de un juez. Por contra, la oposición puso de manifiesto que los cargos contra Berlusconi eran los mismos que contra Previti, lo que suponía una condena moral para el jefe del Ejecutivo, que ahora tendrá que afrontar el resto del proceso en Milán tras la decisión del Constitucional.

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