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La CEOE considera necesario abordar una "profunda reforma laboral" después de las elecciones

Según recoge su último boletín interno, la CEOE considera necesario abordar una "profunda reforma laboral" después de las elecciones generales del 14 de marzo, pero siempre desde el diálogo social entre organizaciones empresariales y sindicales. El objetivo de estas reformas es mejorar la competitividad para que la economía española pueda seguir creciendo y creando empleo a pesar de los compromisos del Protocolo de Kioto y la ampliación de la UE.

(Libertad Digital) Los empresarios creen, igual que el Ejecutivo, que el mercado laboral necesita acometer reformas, y apunta algunas como la modificación de la Ley de Huelga, la simplificación de los contratos laborales o la reforma de la negociación colectiva, "fundamentales para mejorar de forma notable la competitividad de nuestro tejido productivo".
 
Según informa la agencia de noticias Europa Press, la organización empresarial considera que dicha reforma debe entrar en el fondo y en la naturaleza jurídica de las relaciones laborales "alejando cualquier tentación de imposición". "La experiencia ha demostrado que los mejores acuerdos y los que han significado un mayor avance para la sociedad han sido aquellos que han partido del consenso entre empresarios y sindicatos", añade.
 
En su boletín del mes de enero, la CEOE afirmaba que 2004 se presenta como "un año que pondrá a prueba la competitividad de la economía española". Entre las nuevos retos a los que España se enfrentará este año, la patronal citaba  los compromisos adquiridos en relación con el Protocolo de Kioto y la desviación del comercio y las inversiones como consecuencia de la ampliación de la UE. Si se consigue mejorar la competitividad y se corrigen los desequilibrios del comercio exterior, el PIB español podría crecer un 3 por ciento.
 
A juicio de la CEOE, España necesita también: una mejora sustancial de la enseñanza y la formación, un impulso para la denominada "sociedad del conocimiento", modernización de nuestras Administraciones Públicas, mantenimiento del equilibrio presupuestario, reducción del tipo general del Impuesto de Sociedades y de las cotizaciones empresariales a la Seguridad Social, completar la supresión del Impuesto de Actividades Económicas y mejorar la  nueva Ley General Tributaria.

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