L D (EFE) "Queda por ver cuándo se podrá hacer", dijo el jefe del Pentágono, para insistir en que ésa es "una posibilidad" y que comparte esa posición con el secretario de Estado de EEUU, Colin Powell.
Previamente, el secretario general de la Alianza, Jaap de Hoop Scheffer, había dicho que Irak "ya está en la agenda de la OTAN", pero que hay que "tomar las decisiones cuando la situación esté madura" y ver cuál es la evolución política allí.
Para el secretario general de la OTAN, la prioridad en este momento es Afganistán, y en Irak habrá que ir "paso a paso". Por su parte, Rumsfeld dejó claro que EEUU "cree que la OTAN debe desempeñar un mayor papel en los dos sitios, en Afganistán y en Irak". La Alianza Atlántica, dijo Rumsfeld, "se encuentra en un momento de transición, pues está transformando no sólo su capacidad, sino su misión", que cada vez más se desarrollará fuera de su ámbito "tradicional".
El jefe del Pentágono subrayó que diecisiete países miembros de la OTAN están presentes tanto en Afganistán como en Irak y participan en la estabilización de ambos países. Tras hacer recuento de los progresos hacia la democracia en Afganistán, dijo que "en Irak también mejora la seguridad, y los iraquíes debaten los progresos en el proceso hacia la asunción de la responsabilidad política y de seguridad". "Este proceso –dijo– no es atípico en los países que pasan de una dictadura a una democracia".
El jefe del Pentágono evitó con bromas y elogios a la unidad de la Alianza las preguntas que se le hicieron respecto a las armas de destrucción masiva de Irak. Un periodista le recordó las tensiones que hubo en la Conferencia de Munich del año pasado y le preguntó si ahora entendía mejor a sus críticos. Tras calificar con una sonrisa de "desafortunada" la formulación de la pregunta, Rumsfeld dijo que hace un año no todos los europeos se oponían a la guerra de Irak y que actualmente "la Alianza tiene buena salud y la relación transatlántica y entre los europeos ha progresado mucho".