(Libertad Digital) Rajoy hizo este llamamiento en acto celebrado en el Pabellón Polideportivo Escuela de Gimnasia en Toledo. En su opinión, "las encuestas han ido bien" aunque garantiza que no ahorrará esfuerzos por despegarse del PSOE.
Sin embargo, aunque no ofreció detalles, insinuó que encuestas internas le habrían dado mejor resultado que el CIS: "Vamos a trabajar hasta el final para tener muchos más puntos de diferencia de los que se dice por ahí, y tenemos más, pero dependemos solamente de nuestro esfuerzo", explicó Rajoy.
El candidato del PP centró gran parte de su discurso en exigir al PSOE que explique "qué España quiere" y preguntar a Zapatero si ya no le vale el modelo de financiación de financiación autonómica "porque no le vale a Carod Rovira".
Se dirigió a los asistentes asegurando que "España está con el PP porque dijimos lo que podíamos hacer y lo que no, y hemos cumplido". Por eso –añadió– "puedo venir y deciros que estoy orgulloso de ser del PP y haber sido miembro de los gobiernos de José María Aznar". En contraposición recordó un PSOE que "prometió 800.000 puestos de trabajos" y no tiene ahora "autoridad moral para hablar de esto ni de la corrupción", un problema que, según el líder del PP, "no aparece como preocupación entre los españoles" en ninguna encuesta.
Rajoy defendió que el PP ha ofrecido en ocho años de gobierno: "¿Para qué queremos gobernar?", se preguntó, "para defender la idea de España, la de la Constitución del 78 que dice que es España y no otra cosa distinta", respondió. También apostó por garantizar las comunidades autónomas y "la solidaridad entre todos los españoles, sin españoles de primera y de segunda según en qué comunidad vivan".
Los reproches encerraban una clara alusión al PSOE: "Alguien tendrá que explicar qué España quiere". Aclaró que los ciudadanos "no me piden crear 17 tribunales superiores de Justicia, ni 17 agencias tributarias, ni que cambie las Fuerzas de Seguridad de Estado", alertando de las intenciones "del señor Carod Rovira. Según Rajoy, lo que le dicen los ciudadanos "es que trabaje para bajar impuestos, crear empleo" porque, añadió, "para hacer otras cosas está Zapatero, y está Llamazares, que quiere ser ministro".
Un gobierno monocolor del PP
Al ser preguntado sobre si no quiere a CiU en el Ejecutivo, respondió: "quiero hacer un Gobierno del PP; me presento a las elecciones con un programa que he contado a todos los españoles y pido el voto para ese programa electoral. Puedo tener conversaciones con mucha gente, pero yo quiero gobernar aplicando el programa del PP, que es en el que creo".
Se mostró dispuesto también a hablar con el lehendakari, Juan José Ibarretxe, a quien sólo dirá que su plan "no se puede aprobar", y argumentó en este punto: "yo no puedo ser presidente del Gobierno de España para aprobar una norma que diga que España puede dejar de ser España".